El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, no ha aclarado este martes si la exalcaldesa de Valencia y actual senadora del PP, Rita Barberá, será suspendida de militancia en el caso de que el Tribunal Supremo decida imputarla, ya que, ha dicho que «nunca conviene adelantar acontecimientos». Además, ha señalado que hay que quedarse «con lo positivo», como es la voluntad que ha manifestado la exregidora de colaborar con el juez que investiga el presunto caso de blanqueo de capitales en el PP del Ayuntamiento de Valencia.
Así se ha pronunciado en una entrevista en Onda Cero, después de que el Comité de Derechos y Garantías del PP haya decidido suspender cautelarmente de militancia -a petición propia– a los concejales y asesores investigador en Valencia en el llamado ‘caso Imelsa’. Esos ediles seguirán como independientes en el Consistorio.
Al ser preguntado expresamente si Rita Barberá será suspendida también de militancia si llega a estar en la misma situación y es investigada o imputada por el Tribunal Supremo, ha manifestado: «Nunca conviene adelantar acontecimientos. Quedémonos con lo positivo. El juez le ha dicho a la señora Barbera que si quiere comparecer ante él o si quiera mandarle una documentación, que va a hacerlo. Ella ha manifestado voluntad de colaborar con el juez en lo que le pida y a partir de ahí ya veremos cuáles son los acontecimientos que se producen en futuro».
En este punto, Rajoy ha asegurado que el PP tiene abierto un expediente informativo a los investigados en ese caso, pero ha admitido que no sabe el nombre del dirigente del partido que se está encargando de instruir este caso. «Francamente, entiendo que el que haya nombrado el Comité de Conflictos y Disciplina», ha apostillado, para subrayar que está «al tanto» de las grandes decisiones que se toman en el partido pero no en «los detalles». El instructor del caso es el dirigente manchego Francisco Molinero.
Tampoco sabe si le he pedido las actas a los concejales
Igualmente, el jefe del Ejecutivo en funciones ha dicho desconocer si el PP ha pedido las actas a esos concejales del PP en el Ayuntamiento de Valencia investigados en este caso de presunto blanqueo de capitales. «Ellos no han entregado sus actas de concejales. Lo que han pedido es la suspensión temporal», ha dicho previamente.
Tras asegurar que éste es un tema de una «enorme dificultad», ha destacado que hay que ser «enormemente contundente» contra las personas que incurren en actos de corrupción, pero también «hay que ser prudente» porque se puede «condenar a un inocente». Según ha recordado, ha habido muchas personas en su partido que han sido imputadas y luego se ha archivado la causa sin ni siquiera ir a juicio.
Asimismo, ha explicado que los Estatutos del PP sostienen que se suspenderá de militancia a aquellas personas contra las que se abra juicio oral, «salvo casos muy flagrantes». «En este caso, los concejales han preferido pedir la suspensión. No se ha abierto juicio oral y no sabemos si se abrirá porque ésa es otra», ha enfatizado.
Espera que el juez diga que «no ha habido nada»
Rajoy ha admitido que ha «leído» que esos concejales hacían una aportación de mil euros al partido, que luego se les reembolsaba en billetes de quinientos euros. Al ser preguntado de dónde venía ese dinero, ha dicho desconocerlo y ha agregado que eso es lo que «tiene que decir el juez y la investigación interna» del PP que, según ha admitido, por «el momento» no ha arrojado resultados.
En cualquier caso, el presidente del Gobierno en funciones ha señalado que él «respeta» la decisión de los concejales de Valencia. «Espero que al final los tribunales, en cuyas manos ellos están, digan que no ha habido nada y, por lo tanto, puedan volver a su partido», ha manifestado.
El presidente del Gobierno en funciones ha recalcado que el hecho de que una persona sea imputada o citada ante un juez no quiere decir que sea un corrupto y ha recordado lo que pasó en el pasado con el ministro José Manuel Soria, con el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, o con el portavoz del PP en el Senado, José Manuel Barreiro.
«Un juez a veces tarda dos años, tres o cuatro en dictar sentencia y no se le puede decir a una persona que haga un juicio sumarísimo de 24 horas sobre un compañero suyo de partido o incluso sobre una persona que pertenezca a otro partido. Por tanto, contundencia sí contra la corrupción pero también tenemos que ser prudentes porque podemos hacer daño a personas que no han hecho nada», ha concluido.