Este martes, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, destacó que el gobierno valenciano se fundamenta en el diálogo, la capacidad de sumar y entender diferencias. Además, el Presidente remarcó que el gobierno valenciano antepone los intereses generales de la Comunitat por encima del partidismo y ‘cortoplacismo’.
Así de contundente se manifestó Puig en los pasillos del Congreso, después de asistir al debate de la toma en consideración de la reforma del Estatuto de Autonomía de la Comunitat Valenciana. Además, el Presidente remarcó que el gobierno valenciano de coalición supone trabajar ‘juntos’ con miras a mejorar la calidad de vida de los valencianos. Puig, también, dijo que le gustaría que el modelo valenciano se implantara en España. Sin olvidar la ‘aritmética parlamentaria existente’, insistió Puig.
Además, el Presidente afirmó no poder dar una respuesta sobre si habrá o no acuerdo con el gobierno central porque no es ‘ningún adivino’. Pero, manifestó que la Comunitat está dispuesta a colaborar con el Estado para alcance el deseado pacto autonómico.
En el encuentro con el ministro de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro, Puig trasladó la necesidad de la adopción de medidas extraordinarias que garanticen la aprobación de un nuevo sistema de financiación en la Comunitat, que se contretará en un nuevo plan de tesorería para 2016. El plan de tesorería pretende tener un calendario de fondos y de pagos de todas las necesidades de la Generalitat para dar respuesta a las tensiones de tesorería por falta de financiación ordinaria, según ha explicado el President en una comparecencia ante los medios de comunicación posterior a la reunión.
Puig, también, solicitó que dentro del debate se discuta sobre la petición de un FLA extraordinario que cubra el déficit del 2015, el mantenimiento de un tipo del 0% en el Fondo de Liquidez, una solución para los impagos del anterior Consell y la financiación de la totalidad del tratamiento de hepatitis.
Artículo redactado por Tania Arguedas, redactora de Valencia News