El hijo del edil de Serra acusado de matar a su mujer denuncia las circunstancias de la muerte de su padre en Picassent

El hijo del edil de Serra acusado de matar a su mujer denuncia las circunstancias de la muerte de su padre en Picassent. El hijo de Marcos Cabo, el edil de Serra (Valencia) que fue acusado de matar a su mujer, ha presentado una denuncia por el fallecimiento de su padre en la cárcel de Piccasent por si hubiera habido un error en su vigilancia y por las circunstancias que han rodeado la muerte de su padre. Marcos Cabo fue hallado muerto el pasado domingo en Picassent, donde estaba ingresado por orden judicial.

La denuncia fue presentada este pasado lunes a la jueza que ya estaba investigando el fallecimiento de Marco Cabo, según han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Así, la denuncia se une a la investigación abierta después de los hechos por el juzgado de guardia.

Cabo había sido detenido el miércoles de la semana pasada y había ingresado en prisión después de haber sido puesto a disposición judicial. El edil, que pertenecía a Esquerra Unida, fue encontrado muerto el domingo por personal de la cárcel. Sobre las 8.40 horas fue localizado ahorcado con una sábana desde la bisagra de la ventana de la dependencia en la que se encontraba. Tras esto, se trasladó al preso a la zona médica para intentar reanimarlo, sin éxito. Así, la jueza de guardia de Picassent se trasladó hasta la cárcel para certificar el fallecimiento de Cabo.

Causa abierta

El pasado miércoles 5 de agosto, Cabo fue detenido por la tarde como presunto autor de la muerte de su mujer. Su esposa, exconcejala de Esquerra Unida en Serra, fue hallada muerta en 29 de julio en su casa tras un incendio que se declaró en la vivienda mientras ella se encontraba dentro.

Después de la detención de Cabo, la titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 4 de Llíria acordó para él prisión provisional, comunicada y sin fianza. La causa está abierta por un presunto delito de asesinato.

Texto por Paula Cantó

 

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