Mariano Rajoy ha sido investido presidente del Gobierno con el apoyo de 170 diputados, el voto en contra de 111 y la abstención de 68. Obtenida la mayoría simple necesaria en esta segunda votación, la presidenta del Congreso comunicará el resultado a S.M. el Rey, Felipe VI, quien nombrará al jefe del Ejecutivo.
Entre los diputados del PSOE, el partido que ha sido el artífice del desbloque político de España, únicamente ha habido 15 ‘no’, los del PSC, las independientes Margarita Robles y Zaida Cantera, el vasco Odón Elorza o el diputado socialista balear Pere Joan Pons. El resto de diputados socialistas han votado en forma de abstención.
Ciudadanos, quien también varió su postura desde el ‘no’ a la ‘abstención’, y rápidamente al ‘sí’, cumplió su palabra y apoyo a Rajoy sin exigir cambios radicales en el entramado institucional español ni en la situación política del país. Otras formaciones que también mostraron su apoyo al PP fueron Coalición Canaria, a través de su única diputada, Ana Oramas, o Foro Asturias y UPN, ambas formaciones regionales vinculadas al PP.
Uno de los omentos más tensos fue el protagonizado por Gabriel Rufián, el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), quien acusó al PSOE de ‘traidores’.
Asimismo, cabe destacar que todos los diputados del PSPV-PSOE emitieron su voto en forma de abstención, a pesar de que algunos de ellos, como el valenciano José Luís Ábalos, había defendido la abstención técnica de únicamente 11 diputados, esto es, los necesarios estrictamente para desbloquear la situación.
Igualmente destacable en la jornada de ayer fue la dimisión como diputado del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. En una declaración sin preguntas, Sánchez anunció un “momentáneo paso al lado” acusando a la gestora de no escuchar a los militantes. Recordó que durante el mes de octubre se realizaron centenares de asambleas en agrupaciones socialistas que fueron convocadas de forma voluntaria y en las que el no a Rajoy fue mayoritario. Lamentó que, a pesar de ello, no se hubiera celebrado una consulta a los afiliados que, a su juicio, habría servido también para legitimar la decisión de la gestora de que sean todos los miembros del Grupo Socialista los que se abstengan en lugar de los once necesarios.