Hoy es el día. 45 días después se sabrá en que categoría jugará el Elche la próxima temporada. Desde que el 5 de junio, La Liga comunicase el descenso administrativo de la entidad franjiverde, el club franjiverde ha agotado todas las vías posibles para conseguir remediar dicha decisión y conseguir la permanencia en primera división. Con el certificado positivo de Hacienda en mano, el club franjiverde depende de un magistrado para conocer su futuro deportivo inmediato.
Desde las 12 del mediodía, las partes (Liga, TAD, Eibar y Elche) declararán ante el juez de la Audiencia Nacional. Aunque el Ayuntamiento mostró su intención de personificarse también en la causa como parte perjudicada del descenso, no será hasta esta mañana cuando se sepa si al final lo hace o no. Anoche, el alcalde la ciudad, Carlos González, escribió en Twitter que “mañana (por hoy) todos unidos con el Eche a la espera de una resolución judicial en la Audiencia Nacional que nos permita seguir siendo un club de Primera”.
Mientras tanto, el presidente de la LFP Javier Tebas, sigue fiel a su mensaje y en caso de que la jueza diese la razón al Elche se mantendría en Primera a costa de un Éibar que pide una caución de descenso de 18 a 30 millones de euros. “Espero que se mantengan las decisiones”, declaró en el diario Marca. Dicha fianza que solicita el conjunto eibarrés sería por los daños y perjuicios ocasionados por la decisión judicial. Tebas entiende que la medida tomada por la patronal de los clubes la ratificó el Tribunal Administrativo del Deporte.
Del mismo modo, Tebas cree que el Elche confunde las cosas. Sin embargo el mensaje lanzado por el presidente de la LFP en los últimos días empieza a tambalearse ante la arbitrariedad objetiva de la justicia ordinaria, ya que en el caso de las anteriores alegaciones no las ha habido debido a la buena relación que mantiene el máximo representaste de La Liga con el presidente del consejo superior de deportes.