La anti crónica del 9 d’octubre

Eran las 11:30 de la mañana, y en el salón de cristal del ayuntamiento me he dado cuenta de que iba a ser un día insólito:

Rita Barberá no vestía de rojo y Amadeu Sanchis llevaba corbata.

Amadeu Sanchis 9 Octubre

Desde el inicio de la procesión cívica se han escuchado abucheos a los políticos y a la AVL, a la vez que aplausos y vítores. El momento más complicado ha sido cuando tras pasar la comitiva, la policía ha retirado parte de las vallas que separaban a  valencianistas, simpatizantes de Compromís y ex trabajadores de RTVV.

Trabajadores RTVV 9 octubre

Quizá Antonio Machado se quedó corto con lo de las dos Españas. Dos Españas, dos Valencias, dos Cataluñas …

valencianistas

 

 

Muchos siameses condenados a entenderse.

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Por suerte, en los extremos siempre hay gente dispuesta a apaciguar los ánimos.

Ya en la catedral, el nuevo arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, presidía por primera vez el Te Deum, y se ha dirigido en valenciano a los asistentes en todo momento.

Al parecer, en el Parterre se ha reproducido otro enfrentamiento con los mismos protagonistas que en la plaza del ayuntamiento, aunque en esta ocasión no lo he podido constatar.

Finalmente, quiero solidarizarme con las mujeres que recorren la procesión cívica con tacones. Isabel Bonig, de rojo alcaldesa (¿Estaría mandando una señal para las municipales?), caminaba con cara de sufrimiento a la altura del teatro principal, cual Nuria Espert interpretando a Medea (bueno, igual no tanto). Por eso creo que además de pedir más financiación al Gobierno de España, debemos exigir que se suavice el protocolo de la procesión cívica, para que nuestros políticos puedan hacer el recorrido en Valenbisi y con zapatillas.

 

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