Sevilla como principio y fin

Quizá se deba a la alergia, a las mariposas primaverales o simplemente a alguna copa de más, pero en los meses de abril me da siempre por divagar mentalmente e imaginar escenarios hipotéticos, posibles pasados, presentes y futuros alternativos y volar a través de ellos sin las ataduras de la cruda realidad. A menudo esta temporada se ha planteado la cuestión en conversaciones informales: ¿qué hubiese sido de este equipo de haber ganado en Sevilla el 2 de junio de 2013?