Cómo gestionar nuestras emociones. El coach profesional, José Sánchez Labella ha abordado el tema de las emociones en el programa ‘I ara qué’ de News FM 98.7
Para Sánchez Labella existen seis emociones básicas, miedo, asco, tristeza, alegría y sorpresa. Debemos aprender a gestionarlas, ya que todas ellas son necesarias en su justa medida.
Una emoción es una reacción afectiva más o menos espontánea ante un evento significativo. Y cada emoción nos predispone de una manera a la acción. Hay que trabajar la habilidad para manejar con efectividad las reacciones afectivas.
La inteligencia emocional, es la capacidad de sentir, entender, controlar y modificar estados anímicos, tanto propios como ajenos. Anticipándose e identificando la reacción de una forma positiva, ecológica y proactiva. Para ello debemos utilizar los denominados factores clave: empatía, autorregulación, autoconocimiento, relaciones sociales, automotivación, actitud positiva y aprender a desaprender.
La emoción nos invade, pero sí podemos reeducar cómo reaccionamos ante ellas. “Debemos reconocerlas y anticiparnos. Gestionarlas de manera más ecológica para nosotros”, ha manifestado Sánchez Labella.
La clave en el éxito profesional está en distinguir entre saber hacer y saber ser. Para el coach, la aptitud, el talento y la gestión emocional conducen al éxito profesional.
Para gestionar nuestras emociones hemos de conocer nuestro “yo”. Reconocer emociones y sentimientos propios. Manejar de forma positiva esas emociones y sentimientos. Crear el propio estimulo y saber motivar a los demás.
En la parte exterior debemos entender los sentimientos de los demás y comprender su perspectiva. A eso se le llama empatía. “Las personas oímos, pero no siempre escuchamos, por eso es importante una escucha activa”, ha señalado Sánchez Labella
Para reconocer nuestras propias emociones y cómo reaccionamos ante ellas es básico el autoconocimiento. Un conocimiento interno de nuestras fortalezas y debilidades.
La autoconfianza implica desarrollo personal y lo podemos alcanzar aprendiendo de las experiencias negativas, errores o fracasos, reconociendo las experiencias positivas y éxitos, evitar comparaciones con los demás, ser perseverantes con exigencia personal y esfuerzo por mejorar y asumir responsabilidades y retos.
Para controlar nuestras emociones tenemos que saber manejar nuestros estados de ánimo, impulsos y recursos, tener la capacidad para controlar nuestras emociones y adecuarlas a las circunstancias, y siempre asumir la responsabilidad de nuestras acciones.
La técnica de reestructuración cognitiva y reformulación positiva nos enseña a abandonar creencias limitantes que nos incapacitan para crecer y alcanzar nuestros objetivos.
El coach ha manifestado que hay que tener una actitud proactiva, basada en la motivación propia. Anticipándonos a las necesidades y situando el foco en el “voy a” lograr, conseguir, alcanzar…
“Si siempre hacemos lo mismo obtendremos los mismo resultados. Permitamos nuevos aprendizajes e innovar. Crecer”, ha sentenciado el coach.