La supresión del IVA Cultural aplicado, no por el Gobierno, sino por la Sala Russafa, ha servido para que la asistencia de público a las representaciones teatrales se haya incrementado en un 20%, según apuntan a Valencia News los responsables del centro cultural valenciano.
La iniciativa, puesta en marcha el pasado 23 de enero, ha permitido a los espectadores presenciar las obras ‘Mucho ruido y pocas nueces’ y ‘Las Rameras de Shakespeare’ a precios anteriores a la subida del impuesto. Es decir, que por cada entrada han pagado 12 euros, como la temporada pasada, en lugar de los 14 euros que costará en taquilla a partir de marzo. Esos dos euros del IVA, que ha pasado del 8 al 21%, han sido asumidos por el propio teatro.
El director del centro cultural, Juan Carlos Garés, valora la experiencia porque «ha animado el patio de butacas» y «ha elevado la moral de la tropa», pero reconoce que si se mantuviera la iniciativa a lo largo de todo el año «tendríamos que cerrar».
Y es que los márgenes son tan exiguos que el descuento de dos euros por entrada «significaría tener que bajar la persiana porque no salen las cuentas». De hecho el mes sin IVA se ha podido llevar a cabo porque la compañía Arden que ha puesto en escena las obras de Shakespeare es valenciana. «Con compañías que vienen de fuera es imposible rebajar el precio de las entradas porque tienen que asumir más costes», asegura el director de la Sala Russafa.
Por este motivo, la supresión del IVA no se ha podido aplicar a las obras destinadas al público infantil, como ‘Monstruos en la maleta’ de la compañía madrileña Teatro La Tartana, con la que la sala cierra su línea de programación regular para niños de la temporada.
Tal y como sucedió con la reducción de precios en las entradas de cine en algunas salas valencianas, en el teatro, según Garés, «se ha demostrado que una rebaja en el IVA aplicado a los espectáculos de artes escénicas podría incentivar el consumo cultural y aliviar la situación de los profesionales de la cultura».
La pequeña sala se unió a principios de año a las iniciativas comerciales de los días sin IVA con el objetivo de «ayudar a subir la cuesta de enero, que es en realidad la de febrero, y facilitar el consumo cultural, aún a costa de perder nosotros el poco beneficio que nos queda». La campaña, sin embargo, «ha valido la pena porque la gente cuando la entrada es un poco más barata responde y si se redujera el impuesto se recuperaría el consumo cultural», sentencia.
En cualquier caso, el porcentaje del aumento de espectadores es provisional, ya que aún queda una última oportunidad para disfrutar de ‘precios bajos’, desde el jueves y hasta el domingo, con ‘Las Rameras de Shakespeare’ que ha regresado al centro cultural de Russafa después del éxito de la temporada pasada y haciendo un alto dentro de su gira nacional.