Fallece el autor británico Tom Sharpe

El británico Tom Sharpe ha fallecido «tranquilo» en su domicilio de Llafranc, uno de los núcleos de playa del municipio gerundense de Palafrugell, según ha explicado su doctora y amiga, Montserrat Verdaguer, quien ha revelado que el escritor trabajaba actualmente en su autobiografía. Verdaguer ha comparecido ante los medios de comunicación junto a la viuda de Sharpe, Nancy Sharpe; el primer teniente de alcalde de Palafrugell, Albert Gómez, y la directora del hotel Llevant, Carme Farrarons, donde el literato residió durante cuatro temporadas antes de adquirir su actual vivienda.

Tom Sharpe, que vivía solo en Cataluña, ha estado estos últimos días acompañado por su mujer y dos de sus tres hijas, así como por un nieto. Se espera que su tercera hija que reside en Estados Unidosn llegue en los próximos días. El escritor será incinerado tras una ceremonia anglicana que impartirá un pastor residente en el vecino municipio de Madremanya, el próximo domingo a las 08.15 horas.

Posteriormente, las cenizas del escritor viajarán a Inglaterra, donde se repartirán entre Cambridge y la ciudad británica de la que su familia es originaria, Sunderland, aunque parte de ellas quedarán en Llafranc.
Nancy Sharpe ha explicado que «la familia está muy feliz de que Tom encontrase este lugar, fue muy bueno para él, él amaba vivir aquí, primero en el hotel y después en su casa».

«Nosotros amamos venir aquí, donde han sido muy buenos con él», ha señalado Nancy, que reside en Inglaterra y que ha recordado la admiración que sentía su marido por la sanidad española. La esposa de Tom Sharpe ha calificado de «maravilloso» que el escritor pasase sus últimos días de vida en su domicilio, «atendido por médicos, enfermeras y amigos». «Ha muerto del modo menos cruel y estamos contentos por él, una persona que amaba la luz, el Mediterráneo y el sol», ha indicado Nancy Sharpe, quien ha confirmado la intención de la familia de mantener la vivienda en Llafranc «para disfrutar de esta zona».

La doctora que atendía a Tom Sharpe, Montserrat Verdaguer, ha detallado que el británico ha fallecido sobre las 00.30 horas «mientras dormía en su casa, en su cama y rodeado de su familia, así que es triste pero no se puede pedir más». Verdaguer ha explicado que Sharpe trabajaba actualmente en su autobiografía, que tenía escritas unas 30.000 palabras y que, ahora, este proyecto queda incompleto

La doctora ha recordado como salvó la vida del escritor en 2006 cuando sufrió un intenso dolor abdominal que ella intuyó como una peritonitis, por lo que lo trasladó con urgencia al hospital de Girona, donde fue intervenido quirúrgicamente. La directora del hotel Llevant, Carme Farrarons, ha relatado como Tom Sharpe llegó a este establecimiento a principios de los años noventa acompañado por su agente y que Llafranc le produjo «un amor a primera vista».

Sharpe se instaló en una habitación que convirtió en estudio durante cuatro inviernos y entabló amistad con una colonia de ciudadanos británicos, entre los que se halla un promotor inmobiliario que le vendió su actual domicilio. Farrarons recuerda al escritor como una persona «muy disciplinada», que se dedicaba todo el día a su trabajo hasta que, por la tarde, salía a alternar con los clientes del hotel.

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