La niña valenciana de siete años en la que se produjo el milagro aprobado este miércoles por el papa Francisco y atribuido al matrimonio de beatos franceses Louis Martin (1823-1894), y Zélie Guérin (1831-1877) ha participado con sus padres en la ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados, con la comisión fallera a la que pertenecen, según ha informado el arzobispado en un comunicado.
La familia se ha mostrado «muy emocionada» porque, según ha explicado han recibido la noticia de la aprobación del milagro en su hija antes de pasar ante la Virgen en la ofrenda en la que estaban participando en familia cada año.
Respecto al milagro reconocido este miércoles, el padre de la joven ha señalado que se lo van a ir explicando «poco a poco», porque con «ya pregunta qué fue lo que le pasó, sabe que estuvo muy malita en el hospital y va comprendido ya un poco lo sucedido».
Asimismo, ha indicado que «en breve» comenzarán a preparar el viaje a Roma para la canonización del matrimonio de beatos franceses a cuya intercesión se atribuye el milagro, que está prevista para el próximo octubre.
El Papa Francisco ha autorizado este miércoles la promulgación del milagro atribuido a la intercesión de los beatos cónyuges Louis Martin (1823-1894) y Zélie Guérin (1831-1877), padres de Santa Teresita de Lisieux, en una niña valenciana que actualmente tiene siete años, según ha informado la Santa Sede y la delegación episcopal para las Causas de los Santos del arzobispado de Valencia en un comunicado.
La niña valenciana había nacido prematura (en octubre de 2008) después de un embarazo «muy difícil», sufrió múltiples patologías, entre ellas, una doble septicemia y una hemorragia cerebral intraventricular izquierda Grado IV, según indica el informe que presentó el postulador de la causa, el religioso carmelita italiano Antonio Sangalli, en la Congregación para las Causas de los Santos junto con toda la documentación sobre el milagro.