Malos tratos; Violencia de Género. Es fundamental que las personas sepan identificar las primeras conductas de malos tratos. Y para ello cualquier caso de malos tratos habituales en una pareja se deberá abordar de forma personalizada, ya que no existen como tal uno perfil de víctimas ni de maltratador, por lo que sería es primordial y conveniente poder afrontarlo de modo integral por un equipo multidisciplinar formado por Psicólogos, Médicos y Abogados.
Desde el punto de vista psicológico; los Psicólogos Forenses nos inclinamos inicialmente por realizar una completa y exhaustiva entrevista diagnóstica, donde además de la situación problemática que motivo de la demanda, se recoja la información evolutiva sobre antecedentes personales y familiares de interés, así como la totalidad del historial de las parejas anteriores, y como no, la historia evolutiva de la pareja en concreto problemática, su situación actual, su posicionamiento ante la situación, las habilidades y los recursos personales con los que cuenta para un posible de afrontamiento, los posibles apoyos personales de amistades y familiares, su situación socio-económica y laboral, valoración del riesgo, conductas de autoprotección, el grado de concienciación ante el maltrato, incidencias y episodios violentos sucedidos con o sin denuncias, descripción de su pareja (maltratador), posible existencia de comportamientos adictivos en él, tratamientos específicos de tipo psicológico, psicofarmacológico o psiquiátrico y otros aspectos que durante el desarrollo de la entrevista puedan surgir y sean valederos de mención.
Los Psicólogos Forenses posteriormente a la valoración del caso concreto nos planteamos la posibilidad de un asesoramiento y seguimiento individual según posibilidades técnicas y evolución del mismo, asimismo valoramos la conveniencia de iniciar un tratamiento de apoyo psicológico en grupos especializados.
Hay que tener muy en cuenta que el “silencio” inicial del maltrato, se debe a no identificarse en su caso como víctimas de malos tratos, y minimizar este, restando importancia o incluso en ocasiones llegando a justificarlo por diversos factores personales.
En la actualidad se viene observando un incremento de casos de malos tratos en parejas jóvenes que sufren estos malos tratos puntuales o incluso habituales en la pareja y que no llegan a identificarlos por falta de una buena información como malos tratos psicológicos o incluso malos tratos físicos leves (tortazos, empujones, etc.). Es fundamental sobre todo en esta etapa de la vida que las personas jóvenes sepan identificar las primeras conductas de malos tratos, y sobre todo los procesos de control, manipulación, dominio y aislamiento y, que olviden las ideas erróneas sobre el amor, la pareja y los celos.
En las últimas décadas en España se ha avanzado mucho tanto a nivel legislativo como de recursos especializados para la atención integral de las víctimas, llegando a mejorarse la formación y actuación del personal de diferentes ámbitos (médicos, policiales, sociales, y educativos) que si bien cuentan con escasos recursos humanos y materiales, si lo hacen a nivel de calidad y amplitud de recursos especializados de asesoramiento y atención como la concienciación social.
A todas estas mujeres que de una u otra manera, en alguna ocasión o de continuo ven mermados sus valores y su integridad humana, decirles que sus vidas pueden mejorar mucho si las encaminan hacia la consecución de su libertad y de su propio bienestar personal, y sobre todo de sus capacidades muchas veces disminuidas por el maltrato habitual, para tener de nuevo una vida digna donde elijan libremente vivir por sí mismas independientemente de sus circunstancias personales.
Hacer hincapié en la importantísima y urgente educación intrafamiliar en los valores de respeto, cultura del esfuerzo, de la responsabilidad personal.
Texto por Tony Crespo