‘Zapatos rojos’ contra la violencia machista. Este es el lema de la campaña promovida por Amnistía Internacional, y que pretende concienciar y sensibilizar sobre la lacra de violencia machista que afecta a las mujeres de nuestro país y todo el mundo.
Carmen Doménech, activista del área de trabajo por la mujer y las personas LGTBI, de Amnistía Internacional Valencia, ha visitado hoy los estudios de News FM 98.7 para informar en qué consiste esta campaña.
La idea que la artista Elina Chauvet comenzó en México, concretamente en Ciudad Juárez, con el objetivo de denunciar la violencia de género, se está llevando a cabo en Valencia y finalizará el próximo 22 de noviembre, coincidiendo con el ‘Día mundial contra la violencia de género’, con una marcha que reunirá en Madrid a todas las personas que deseen implicarse.
En el magazine matinal I ara qué Carmen Domenech ha denunciado que aún se ejerce violencia de género en muchos hogares, y que esta clase de maltrato no es únicamente físico sino que también está la parte psicológica, y dentro de esta hay varios niveles, desde el insulto hasta el control.
La información y concienciación es fundamental desde una edad temprana, por eso desde Amnistía Internacional y enmarcado este proyecto se imparten charlas en las aulas para que los más jóvenes comprendan la importancia que tiene la igualdad entre hombres y mujeres.
La activista ha explicado que cada zapato rojo simboliza a la mujer, a aquellas que sufren el maltrato y perdieron la vida a manos de sus maltratadores. En este sentido ha invitado a toda la ciudadanía valenciana a llevar zapatos de mujer y de niña de todo tipo de color, talla y estado, no hace falta que sean nuevos. Estos zapatos se recogerán por Amnistía Internacional y formarán parte de una exposición que forma parte de la campaña. Del mismo modo, ha convidado tanto a mujeres como hombres, ha señalado que es un trabajo de todos, a participar en las actividades que organiza la ONG.
Doménech ha animado a que las mujeres levanten la voz y no permanezcan calladas soportando situaciones de humillación y maltrato, acudiendo a asociaciones o instituciones que las puedan orientar. “El entorno es muy importante para ayudar a la mujer maltratada, esta debe sentirse apoyada para no guardar silencio y dar el paso en busca de ayuda”, ha subrayado la activista.