El sindicato pide actuaciones firmes en el proyecto del cuartel policial de Zapadores

Exigen al Gobierno un compromiso firme con el cuartel policial de Zapadores

La Unión Federal de Policía de Valencia (UFP), el sindicato policial con mayor representación en la Comunitat Valenciana y uno de los más numerosos de España, ha reclamado al Gobierno central un compromiso firme con Valencia y con la seguridad de los agentes que trabajan en el cuartel policial Zapadores. Las peticiones pasan porque se retomen de forma urgente las cuatro fases de rehabilitación pendientes en el segundo complejo policial más grande de España.

Así, el sindicato ha recordado que el proyecto global preveía cinco fases que suponían una inversión de casi 52 millones de euros. Una promesa que ha quedado en el olvido, asegura la organización, ya que cuando se cumplen casi 20 años del inicio de las negociaciones  sólo se ha ejecutado la primera de ellas. “Lo que iba a ser el proyecto estrella para la Comunitat Valenciana ha acabado siendo un proyecto estrellado”, han señalado desde el sindicato, ya que a día de hoy, reiteran, «ni siquiera tienen su continuidad en los Presupuestos Generales del Estado (PGE)». Así, han lamentado la situación de hacinamiento que padecen los funcionarios y las deficiencias de las instalaciones de muchas unidades.

Intermediación del Consell

Al respecto,  la Unión Federal de Policía de Valencia ha reclamado al Consell que se posicione y se ponga del lado de la seguridad de los policías y de los ciudadanos e inste de forma urgente al Gobierno nacional a cumplir con su compromiso de reformar el complejo policial de Zapadores  para que esté finalizado antes de 2019, ya que el compromiso inicial planteaba una ejecución de cuatro años para las cinco fases.

Así, la UFP en la Comunitat Valenciana urge al ejecutivo central a asumir el proyecto de rehabilitación como un “proyecto de Estado” ya que, Zapadores, es uno de los complejos policiales más grandes de Europa, con una superficie potencialmente utilizable de 100.000 metros cuadrados, en la línea del complejo de Canillas.

Por todo ello, el sindicato exige “el mismo trato” y el «fin de la marginación» y de la «situación de abandono” del proyecto valenciano, porque “no somos ciudadanos de segunda”. Al tiempo que ha reclamado un compromiso firme para retomar las obras de forma inminente y una planificación detallada de las cuatro fases que quedan pendientes para que culminen antes de 2019.

Fases del Proyecto  

Según el proyecto, la Fase 2 supondría la rehabilitación de edificio principal que tiene fachada a la calle Zapadores, la Fase 3 acometería la rehabilitación del edificio H con el paso subterráneo que conecta el aparcamiento con el edificio de nueva planta, mientras que la Fase 4 comprendería la construcción de un aparcamiento subterráneo con acceso de vehículos y rehabilitación del antiguo polvorín. Finalmente, la  Fase 5 consistiría en la ejecución del edificio multiusos de nueva planta.

De esta manera, la UFP recuerda que la primera fase, cuya ejecución terminó hace ya más de dos años, tenía una previsión de obra de 18 meses y acabó dilatándose tres años. Este proyecto supuso la urbanización interior, la realización de las canalizaciones, la construcción de un nuevo edificio técnico de servicios generales; la reparación de cubiertas en el edificio; la construcción de un cerramiento de muro, “quedando pendiente la evidente y vergonzosa remodelación de la fachada”.

A la situación de abandono se suman las numerosas deficiencias en el sistema eléctrico de las instalaciones, zonas ruinosas y problemas de paso por determinadas áreas debido a los problemas de desprendimiento de cascotes o techados, insisten desde la UPF

 

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