Es extraño que pase un día sin que se produzca algún cambio en la Diputación de Valencia, después de 20 años de gobierno ‘popular’ que ha terminado con la gestión de los últimos responsables del PP en los tribunales. El último de estos movimientos impulsados por el gobierno provincial, que preside el socialista Jorge Rodríguez, es la retirada del coche oficial que utilizaba para sus desplazamientos el expresidente Alfonso Rus. El famoso Audi A8 de Rus saldrá del Parque Móvil de la Diputación, que se ha trazado la hoja de ruta de la movilidad sostenible en el ámbito del transporte interno, y el vehículo será subastado en las próximas semanas.
El Audi A8 4.2 L FSI Quattro Tiptronic tiene historia. El vehículo fue matriculado el 23 de julio de 2007 y prestó servicio al expresidente de la Diputación entre el 14 de septiembre de 2007 y el 25 de marzo de 2015, con algo más de 462.000 kilómetros recorridos. Hasta aquí, el relato de cualquier vehículo oficial, pero es en los costes del vehículo donde el guión presenta un giro inesperado.
El vehículo se alquiló por el procedimiento negociado sin publicidad, en lugar de comprarlo. La empresa Bansalease SA EFC fue la adjudicataria de un servicio de alquiler por dos años por el que la Corporación de Rus pagó 77.432,40 euros. Cumplidos los dos años del alquiler, se decidió adquirir en propiedad el A8, lo que supuso para las arcas de la Diputación otra inversión de 50.736,81 euros. En total, más de 128.000 euros gastados en un coche que en 2007 estaba a la venta por 81.000 euros, IVA incluido.
Los costes del Audi A8 que utilizó Alfonso Rus como presidente de la Diputación no terminan aquí. La Corporación, según datos aportados por el Parque Móvil, que pertenece al área de Administración General, desembolsó 35.126,87 euros en mantenimiento y reparaciones de este vehículo premier, equipado con todo tipo de comodidades, desde asientos calefactables delanteros y traseros hasta nevera para plazas traseras, tapicería de cuero negro, climatizador automático con filtro de polen y partículas nocivas y sensor de humedad e identificación de la llave.
La Diputación presidida por Alfonso Rus gastó un total de 163.296,08 euros en el coche, sin contar el gasto en gasolina de un vehículo que consume 15,7 litros por cada 100 kilómetros en ciudad y 8,2 litros por cada 100 kilómetros en carretera, lo que hace un consumo medio de 10,9 litros a los 100 kilómetros. El A8 que ahora pretende subastar la Corporación de Jorge Rodríguez tiene una potencia de 350 CV, alcanza una velocidad de 250 km/h y tiene un nivel de emisiones de CO2 de 259 gr/km. La valoración económica está entre 15.000 y 17.000 euros, según las mismas fuentes.
Renovación del Parque Móvil
Ahora, el Parque Móvil que dirige Inmaculada Renales, dentro del área de Administración General, que coordina el diputado Pepe Ruiz, tiene previsto sustituir siete vehículos de aquí a final de legislatura, con el objetivo de ir retirando vehículos convencionales y adquirir híbridos o eléctricos que reduzcan las emisiones de CO2 y ahorren en combustible. En total, la Diputación de Valencia dispone en la actualidad de 33 vehículos.
Los tres primeros están ya en marcha. Se trata de tres vehículos híbridos, dos tipo berlina y un monovolumen, que tienen un presupuesto máximo de adquisición de 76.000 euros más IVA. En los criterios de adjudicación prima la oferta económica, con 60 puntos, por delante de las características técnicas, que se valoran con 40 puntos. En este último apartado destaca el impacto energético, que se puntúa con 15 puntos, y otros factores como potencia, consumo y seguridad.
Para los dos vehículos tipo berlina se ha fijado un presupuesto de 64.565 euros, IVA incluido, y para el monovolumen de 28.250 euros, IVA incluido. Los tres vehículos se sumarán al coche eléctrico que el Parque Móvil de la Diputación tiene ya en uso, y que da servicio a los ordenanzas para el traslado de documentación entre las distintas sedes de la Corporación provincial en Valencia. Además, los vehículos que salen del Parque Móvil provincial o bien se retiran, si su estado no es óptimo, o se destinan a los distintos ayuntamientos para que puedan apurar su vida útil. Es el caso de los coches entregados recientemente a Zarra, Godella y Burjassot. Su uso para desplazamientos de escaso kilometraje permite que estas unidades puedan seguir circulando. El A8 de Rus es un caso extraordinario y la intención de la nueva Diputación es sacarlo a subasta, huyendo de lujos innecesarios.