El presidente del Comité del comité de Empresa de Sodexo, Julio García, ha transmitido el respaldo total de la plantilla a la convocatoria de huelga indefinida, iniciada este lunes. “Esta madrugada se han sumado al encierro del comité más de 60 personas, pese a las trabas de la seguridad, que ha impedido el paso a la factoría a una docena de compañeros identificados con la tarjeta del servicio de comedor” denuncian.
Hace seis días que el Comité de Empresa permanece encerrado en uno de los comedores de la factoría en protesta por la actitud inmovilista de la dirección en los planteamientos de un ERE que afecta al 62% de la plantilla. “La falta de respeto ha sido constante, con sirenas cada hora, cambios bruscos en la calefacción y el aire acondicionado y varios intentos de desalojo tanto por los servicios de seguridad como por el propio director” explican desde el comité.
El objetivo de la huelga es que Ford asuma su responsabilidad con sus trabajadores, ya que pese a depender de Sodexo, es la Multinacional quien asume los salarios e indemnizaciones. “Aunque la contrata cambia, hay trabajadores de comedores que llevan décadas trabajando en Ford Almussafes y merecen una recolocación, sobre todo en un momento en el que se plantean contrataciones masivas” argumenta García.
El comité de huelga ha planteado acciones diarias de información de las propuestas de viabilidad al grueso de los trabajadores, ya que la reducción del servicio repercute directamente sobre las condiciones de trabajo de toda la factoría. Desde el comité se busca el respaldo del grueso de los operarios apelando a la doble función del servicio de comedor “nadie prefiere comerse un bocadillo en cualquier sitio, a saber que dispone de comida caliente en un espacio común que permite comunicarte con tus compañeros”.
Entre las propuestas planteadas a la dirección destaca la de que se permita sumar la pausa de diez minutos con los 15 establecidos para la comida, algo que no supondría un coste económico ni perjudicaría la organización del trabajo. Según un estudio realizado en 2008 y aparcado con el cambio de turno, esto posibilitaría que 3.000 trabajadores de la cadena pudieran comer de caliente, o llevarse la comida de caliente con fiambreras al finalizar su jornada, “y nosotros mantendríamos nuestro puesto de trabajo” concluyen.
La eliminación del tercer turno truncó una apuesta en la que la empresa ya realizó la inversión necesaria en material de trasporte y conservación de los alimentos según las normas sanitarias. “Hemos propuesto elaborar la comida en cada cocina autónoma y no desde una cocina central para una mejor calidad y servicio para desafectar a más personas del ERE, pero Sodexo no quiere negociar”, lamentan.
El Comité de Empresa ha exigido que la empresa respete el acuerdo de junio del 2000 donde se recogían las medidas para atenuar los efectos de los posibles eres futuros: prejubilaciones a los 55 años prejubilaciones a los 58 años reducción de jornada, e indemnizaciones que se aproximen a lo que sería un despido improcedente.
«Ford es una gran empresa con beneficios que debe asumir responsabilidades»
La representación de los trabajadores ha convocado una huelga indefinida con la que pretenden dejar claro a la dirección que no van a asumir la contradicción que supone contratar a más de 1.300 trabajadores en la factoría mientras se realiza un ERE en los comedores. También han criticado la paradoja de que el asesor de la empresa Sodexo sea el abogado de Ford.
La propuesta de despido colectivo afectaría a 58 personas de una plantilla fija de 86 que ascendería a 94 si contamos con las personas que tienen un contrato temporal, lo que supone un 62% del total. Una plantilla, que, además, tiene mucha antigüedad en la empresa. Los despidos vienen motivados por planteamiento de Ford del cierre de tres de sus comedores de personal.
En la anterior reunión con la empresa, el comité manifestó a la dirección de Sodexo su disconformidad con las medidas propuestas, especialmente con el número de despidos. Asimismo, se solicitó la implicación directa de Ford España, por la especial responsabilidad que la misma tiene en las relaciones laborales del personal que presta el servicio en sus comedores de personal.