¿No hay dinero?

“No hay dinero”. Eso es lo que dijo la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández, al ser preguntada por la financiación. Pero haberlo, haylo. El problema es que no se gasta en lo que toca, mientras los políticos intentan convencer a una población cada vez más empobrecida de la necesidad de continuar aplicando recortes. Sus sueldos les esquilmaba yo cada vez que osen pronunciarlo, para que prediquen con el ejemplo.

Al menos, en sus declaraciones, Fernández dejó bien a Alberto Fabra al reconocerle que es “muy reivindicativo”. Faltaría plus. Pero es que, a partir de ahora, de qué sirve plantarle cara a Madrid si después nos la colorean diciéndonos que el actual modelo de financiación “no se va a modificar”.

¿De qué sirve que nos reconozcan que es una injusticia y que estamos mal financiados, si a la Comunitat no llega un euro más de lo que nos toca? ¿Por qué no vuelven a poner aquellas vallas que se emplearon con Zapatero? Sí aquellas de ‘Para Zapatero, uno de cada cinco valencianos no existe’. Que cambien ZP por Rajoy y ya tenemos campaña.

Lo peor de todo este asunto es que ahora no hay duda posible. Los ciudadanos le han otorgado al PP la confianza mayoritaria en España y en la Comunitat. Y si todas las reivindicaciones de la población no son atendidas, el culpable no será Zapatero, ni el PSOE. Hay que recordar que fue Rajoy quien se hizo la famosa foto ante la cola del paro para asegurar que mejoraría la situación.

Ni los bous al carrer, ni el Plan Hidrológico Nacional, ni el fantasma catalán…. Que el ciudadano no es tonto, oiga. Que somos una Democracia joven, pero que va aprendiendo. Los votantes maduran y cada vez castigan más a quien intuye que le quiere engañar.

Los votos se decidirán en función de la situación económica y según los datos de desempleo. Si la situación mejora ostensiblemente, el PP conseguirá un discurso creíble. Si no, el electorado se sentirá engañado y defraudado.

Y sí. Hay que cumplir el déficit. Pero inténteselo explicar a mi vecina, a ver si lo entiende. Más copagos y más reducciones de sueldo a los trabajadores públicos no son la solución. Querido lector estén atentos al lenguaje para que no les engañen con eufemismos de nuevo cuño. Donde dicen medidas de ahorro, lean repago. Y así un suma y sigue.

 

Fernando Alabadí

@MeridianoHorta @Fernandoalabadi

Director de El Meridiano L’Horta

www.elmeridiano.es

 

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