Todos sabemos quién es Papá Noel, va de rojo, tiene una gran barriga y barba blanca. Vive en el Polo Norte y se desplaza de forma ecológica. La tasa de CO2 es 0, gracias a sus 8 caballos, perdón, a sus 8 renos… comandados por Rodolfo. La emoción de verlo y poder pedirle un regalo es mágica para todos los peques…
Pero, hoy las fiestas han recibido la inestimable ayuda de otro Papá Noel, llamado por los no tan peques, Papá Marketing, el que hace milagros y todo lo vende. No va de rojo, pero mal utilizado hará que sus números acaben en rojo. Tiene una gran barriga que alimentar, llamadas ventas. Y hoy en día, con o sin barba blanca, los responsables están cada vez mejor preparados. No vive en el Polo Norte, vive en cada empresa que quiera elevar sus cifras de ventas y paga salarios e impuestos. No tiene renos, pero si expertos comerciales que tiran de la empresa. Y la empresa que emociona a sus clientes, tiene el mejor regalo, las ventas.
En estas fechas que se acercan y que si esto continua así, en verano ya empezaremos a poner las luces y adornos navideños para dar la bienvenida e incitar al consumo. Papá Marketing, se preocupa de las empresas, de los clientes, de los proveedores, de la comunicación interna y externa, de la logística… y sus cuatro mandamientos de partida siguen siendo las ¨4 P¨: Product, Price, Place y Promotion.
Toda empresa que se aprecie, pondrá en marcha y a pleno rendimiento al todo poderoso Marketing. La comunicación, las promociones, los detalles navideños, los flyers, los e-mails y demás acciones, para atraer el interés de sus clientes. Pero no olvidemos que, si durante todo el año, hemos sido ¨malos¨ y a última hora queremos realizar un esfuerzo titánico para reclamar más clientes y elevar las cifras de ventas… mucho me temo, pero el esfuerzo, no dará los resultados esperados. El marketing debe ser el día a día de toda empresa y los esfuerzos se verán recompensados con ventas a lo largo de todo el año y aumentadas en fechas señaladas y en función de la estacionalidad de la empresa.
Pena, penita, pena… y como suele pasar con Papá Noel o con los Reyes Magos y los peques, a medida que se acerca la fecha señalada, nos acordamos de lo buenos que tenemos que ser… pues al niño malo, sólo le dejan carbón (los Reyes Magos). Y en muchas empresas, ocurre lo mismo. El resto del año, tienen descuidado el marketing, en todos sus sentidos o solo hacen caso a determinadas facetas, olvidando el resto. Pues para estas empresas, también existe el carbón. Y este se llama ¨números rojos¨.
La empresa es un todo. Si su imagen está deteriorada, no es creíble, sus empleados están explotados y la palabra crisis es su excusa preferida, entonces seguirá sin dar confianza en estas fechas, por muchas campañas de marketing que se emprendan. Pues lo que no acaban de entender, es el concepto de Marketing, ese gran desconocido. Les pongo un ejemplo bien claro. Dos manos, diez dedos. Cada uno representa, por ejemplo, el índice, la comunicación, el pulgar, el producto y así hasta cubrir todas las facetas del marketing. Pues, si usted, sólo utiliza el dedo índice, durante todo el año… el resto de dedos estarán atrofiados el día que quiera utilizarlos. Necesita los 10 dedos. Dicho de otra forma, necesita el marketing con todas sus facetas, para aumentar la probabilidad de éxito de su empresa y de supervivencia.
Y usted ¿Papá Noel o Papá #Marketing?
Emil Serrano, Consultant Marketing
@Emil_MKG