La situación en Cataluña preocupa no sólo a los políticos, sino también a empresarios y hasta a militares, según diversas informaciones solventes. Tras la consulta del 9N es más que probable la celebración de elecciones anticipadas en los antiguos condados, con previsible triunfo de ERC o, en todo caso, de una lista de concentración encabezada por Mas.
Si sucede lo primero, la declaración unilateral de independencia está cantada. Si lo segundo, pues caso que también. Y una de las colateralidades de ese supuesto es el efecto que causaría en las grandes empresas radicadas en una Comunidad que quedaría fuera del euro. Entre ellas, los bancos. Es decir, La Caixa y Banco de Sabadell.
Los primeros hace tiempo que mostraron su habilidad para ir sacando de su nombre comercial la palabra Catalunya. No en vano el 75% de su negocio no es catalán. Sus responsables hicieron como los de la CAM de hace años, que, fusión tras fusión, fueron eliminando las palabras Sureste, Alicante y Murcia de su marca, buscando algo más global. Mediterráneo fue su opción. Bancaja hizo lo propio con Valencia y Castellón, y por si acababa habiendo entente con la CAM.
Pocas entidades bancarias quedan ya con un topónimo en su marca. Santander es una de ellas. Pero es que Santander no es problemática, ni separatista ni nada, así que no importa, no molesta. En cambio el nombre de Sabadell, en un banco que si se produce la declaración de independencia va a tener obligatoriamente que tener su sede fuera de Sabadell y del resto de Cataluña, sí es un problema. Y grave. ¿Alguien ha pensado en ello? ¿Y qué nombre alternativo se les ocurre para la entidad vallesanoalicantinomurciana? ¿Mediterráneo tal vez?