Caixa Ontinyent, una de las dos cajas de ahorro españolas que sigue en solitario y no ha abordado procesos de fusión, logró en 2012 un beneficio neto de 0,8 millones de euros, lo que supone un 14,62% menos que el ejercicio anterior.
La Asamblea General Ordinaria aprobó las cuentas y la obra social realizada en 2012, así como la distribución de beneficios a partes iguales para reservas y obra social, lo cual permitirá, según un comunicado, mantener un alto nivel de capital y el programa de obra social.
Los resultados de 2012 antes de dotaciones fueron de 14,9 millones de euros, de los que se destinan 14,5 millones a provisiones «con el fin de cumplir las normas sobre saneamiento del sector financiero y mantener un alto nivel de cobertura», añade la fuente.
A 31 de diciembre de 2012, el capital principal se situó en el 10,53 % y con las nuevas normas aplicables a partir del 1 de enero pasado, el capital principal se sitúa a 31 de marzo en el 9,93 %, el core capital en el 10,00 % y la solvencia total en el 12,35 %.
Según la entidad, los resultados del 2012 y la distribución acordada permiten mantener los programas más prioritarios de la obra social de Caixa Ontinyent, que cuenta con veinticuatro centros en funcionamiento en doce localidades, con 191 puestos de trabajo estable, desarrolla más de 300 actividades anuales, colabora con unos 200 colectivos y beneficia directamente a 203.000 personas.
El presidente de Caixa Ontinyent, Antonio Carbonell, ha presentado a la Asamblea General un balance de la gestión en los primeros meses de este año, señalando que en 2013 continuará aumentando la morosidad y «será conveniente destinar el máximo a provisiones y saneamientos para mantener la calidad de la cartera de inversión y la solvencia». Asimismo ha destacado el deterioro en la renta de las familias, la disolución de sociedades mercantiles, la rescisión del crédito y las expectativas de las cuentas de resultados.