El término de playa accesible, no consiste únicamente en que el acceso a la playa sea fácil, sino en conceder a estos lugares de esparcimiento las dotaciones adecuadas para que los discapacitados puedan disfrutar en igualdad de condiciones del sol y el mar.
Entre estos servicios adaptados destacan rampas y pasarelas, cabinas adaptadas, lugares con sombra y sillas y muletas anfibias para facilitar el baño a los usuarios. Además, los puntos de playas accesibles cuentan con personal especializado que atienden en todo momento a las personas que necesitan ayuda para acceder a la orilla con facilidad y bañarse con total seguridad.
El Plan de Playas Accesibles de la Generalitat se empezó a configurar en 2000 con el objetivo de facilitar a las personas con algún tipo de discapacidad o movilidad reducida el uso y disfrute de las playas de la Generalitat. Desde la puesta en marcha de esta medida se han invertido un total de 3,2 millones de euros en infraestructuras y equipamiento.
En total, la Comunitat dispone de 81 playas accesibles que se han acogido al procedimiento promovido por el consistorio. Alicante cuenta con 26 puntos de playa accesible en 15 municipios, en Castellón se cuenta con 22 zonas adaptadas al baño en 14 localidades y en Valencia hay 33 áreas destinadas a este uso en 17 poblaciones costeras.
El compromiso de la Generalitat es eliminar las barreras arquitectónicas y físicas que dificultan el acceso a estos destinos de ocio y vacaciones para garantizar unos recursos asistenciales de calidad, con servicios especializados, multidisciplinares, integrales y profesionales que fomenten la accesibilidad universal a todas las personas.
Según datos facilitados por los municipios de la Generalitat, con puntos de playas accesibles, alrededor de 46.000 personas con discapacidad y movilidad reducida disfrutaron de las playas de la Comunitat durante el verano pasado. Con esta nueva ampliación, de puntos accesibles, durante este verano se prevé duplicar los servicios prestados.