«El ambiente emprendedor se palpa en cada rincón de Silicon Valley»

 

 

 

Como premio por ganar en Castellón la fase local de una aceleradoral para emprendedores tecnológicos, Marina Soriano ha viajado del 21 al 27 de julio hasta San Francisco para descubrir el ecosistema emprendedor de la ciudad y de Silicon Valley, la meca a nivel mundial de la innovación tecnológica e Internet. Una experiencia que ha compartido con otros 33 participantes de la aceleradora, cada uno de una autonomnía diferente y que cuenta en exlusiva a VLC News.

La agenda estaba muy completa; visitamos grandes empresas como Google, HP e Intel. Donde pudimos conocer de cerca las áreas de innovación en las que trabajan o cómo se han adaptado y reinventado con el paso del tiempo. Todo ello de la mano de trabajadores de las propias compañías que compartieron con nosotros su tiempo y sus conocimientos.

 

Durante el viaje también visitaron la prestigiosa Stanford University y asistieron a una masterclass privada sobre emprendedurismo impartida por el profesor Burton Lee.

 

Algo que me sorprendió muy gratamente desde el primer día fue que con cualquier persona que hablase sobre la idea de montar una startup tecnológica, todo el mundo te tomaba en serio a pesar de mi juventud, incluso aunque fueran mayores de cincuenta años o no fueran emprendedores. Sin embargo, en España suele decir que quiero montar mi propia empresa en Internet genera mucha incredulidad : “¿Qué tienes 24 años y quieres crear una empresa?”, además de muchas dudas “¿Pero eso de startup qué es?” y comentarios pesimistas como “Eso seguro que ya existe, a estas alturas está todo inventado”.

 

Además de estas grandes empresas los 33 finalistas de la aceleradora también conocieron en primera persona startups y lugares menos oídos pero idóneos para startups tecnológicas en sus primeras fases.

 

El ambiente emprendedor es palpable en todos estos sitios: oficinas compartidas, salas de juegos donde desconectar, carteles en las paredes que animan a cometer errores o el lujo de poder charlar tranquilamente con los fundadores y los trabajadores. Uno de esos sitios menos conocido fue la aceleradora RocketSpace, donde trabajan para que las startups que allí se alojan crezcan más rápido y maduren enriquecidas por sus expertos y por las sinergias que se generan gracias al coworking.

 

Asimismo, tuvieron la oportunidad de charlar con el CEO de RocketSpace, Duncan Logan, y con varios emprendedores españoles que ya han dado el salto en la ciudad. Durante la charla les hablaron sobre su experiencia, las dificultades que se encontraron a la hora de fundar una empresa en Silicon Valley y por qué a pesar de todo vale la pena.  

 

Las diferencias entre emprender en Europa o en Silicon Valley son grandes y como dijo Eneko Knörr si estás en Silicon Valley pasas a “jugar en primera división”. También pudimos conocer al director del Spain Tech Center, otra iniciativa de la Fundación Banesto y el ICEX que ayuda a empresas españolas a instalarse y trabajar en Norte América.

 

Una de las actividades más esperadas por los jóvenes españoles fue la Spanish Pitch Night, un evento que reunió a más de setenta personas entre emprendedores, profesionales e inversores. Marina Soriano tuvo la oportunidad de ser uno de los cinco seleccionados para representar a todo el grupo de la aceleradora y presentó su proyecto, Tandem Spot, ante el público.

 

Durante mis tres minutos hablé de que para hablar correctamente otro idioma sólo hay una manera: practicarlo. A menudo pasar tiempo en el extranjero o contratar clases de conversación con nativos resulta complicado, de modo que el tándem surge como una alternativa muy atractiva. Un tándem es un intercambio oral y cultural entre dos personas, donde cada una quiere mejorar la lengua materna de la otra. En Tandem Spot queremos llevar esa experiencia del tándem del mundo offline al online y permitir así que cualquiera pueda mejorar su oral de idiomas desde casa a través de videoconferencias. Un discurso que estuvo muy apropiado ya que por si hablar ante un público tan numeroso y profesional no fuese reto suficiente, debíamos explicar todo el proyecto en inglés. Algo que sin haber practicado bastante el idioma antes habría sido muy muy complicado.

 

A parte de una aprendizaje constantes, también hubieron momentos para la desconexión y la relajación, como una barbacoa que sirvió como excusa para hacer networking con otros emprendedores de diferentes procedencias pero con un mismo destino: Silicon Valley. Los anfitriones del grupo de Yuzz  fueron el equipo de Startup Embassy, un lugar situado en Palo Alto que abre sus puertas a emprendedores que quieren establecerse en el valle facilitándoles alojamiento, espacio de trabajo y una primera red de contactos para que no caminen solos. Una iniciativa que pone de manifiesto la importancia de los contactos.

 

Después de una semana intensísima me traigo la maleta llena de ganas de seguir trabajando duro, con energías renovadas. Ha sido una experiencia tremendamente inspiradora, ser un Yuzz en San Francisco me ha abierto muchas puertas inalcanzables de otro modo. Pero sobretodo me ha permitido conocer a personas increíbles comenzando por mis 33 compañeros de viaje que derrochan talento, ganas y empeño. Poder compartir con otros emprendedores de diferentes lugares experiencias, dudas e ilusiones nos hace ver que no estamos solos, que no estamos locos. Estaríamos locos si no lo intentáramos.

Ir arriba