El 4 de junio, en el programa La Taula Esportiva, se le realizó a Aurelio Martínez una pregunta muy sencilla: «¿Le gusta a usted la marca Adidas?» El presidente de la Fundación, sorprendido por lo directo de la cuestión, se limitó a esbozar una sonrisa y a echar balones fuera.
Porque, ni en aquel momento ni en el actual, la cúpula directiva del Valencia CF quería que se filtrasen públicamente las maniobras entre bambalinas que se estaban llevando a cabo. Como apuntó ayer el diario El Mundo, el Valencia lleva semanas manteniendo contactos con la multinacional germana. El plan es que Adidas vista al club de Mestalla a partir de la temporada 2014-2015 y que utilice sus amplios recursos y tiendas oficiales a lo largo del mundo para aumentar los ingresos de explotación del equipo che.
Varias aristas y obstáculos se otean en el horizonte. El principal, el acuerdo firmado con Joma en verano de 2011 después de la experiencia frustrada con la firma italiana Kappa. Joma firmó un contrato como proveedor de las equipaciones blanquinegras hasta junio de 2016, y romper dicho acuerdo le costaría al Valencia cinco millones de euros en concepto de penalización.
El plan es que Adidas vista al primer equipo, a todas las categorías inferiores y al resto de estamentos del Valencia a partir de la temporada que viene. El presidente, tras lo visto en EE.UU., pretende que la multinacional alemana ayude a dar un impulso a las ventas fuera de territorio español.
Por su parte, Adidas quiere que el Valencia sea su segundo club de referencia en España -tras el Real Madrid-, y ha puesto sobre la mesa una propuesta de unos 2,5 millones de euros anuales y un 14% de los ingresos por royalties para la arcas del club che, según el citado medio.