Por los pelos, pero se salvó el pellejo. El Valencia Basket cumplió con su trabajo y sacó la victoria en Valladolid, aunque sufrió más de lo debido y tuvo que emplearse a fondo en defensa durante el último cuarto para evitar la sorpresa de la temporada (77-91). La pareja interior formada por Doellman y Dubljevic (32 puntos y 42 de valoración entre ambos) llevó el peso anotador del equipo, pero fueron los triples de Rafa Martínez (12 puntos) los que despertaron a los valencianos en el último cuarto, al que llegaron por detrás en el marcador.
Fue una cuestión de carácter. El parcial en ese período final fue de 12-32. Suficiente para que el electrónico señalara una diferencia que no tuvo su reflejo en la cancha. El CB Valladolid lo dio todo y se lo llegó a creer con ventajas de hasta ocho puntos en la segunda mitad. La versatilidad de Omari Johnson fue una pesadilla para valencianos (18 puntos y 9 rebotes) aunque, al fin y al cabo, los vallisoletanos son colistas por algo: simplemente, no pudieron dar más de sí cuando se les exigió igualar el paso adelante de su contrincante.
El comienzo fue equilibrado por la falta de intensidad de los ‘taronja’. Una canasta de Andjusic y un tiro libre de Iván Martínez dieron las primeras ventajas para los locales, pero Sato y Doellman se encargaron de neutralizar el empuje pucelano. Mientras Haritopoulos continuaba haciendo daño a los interiores valencianos, la entrada de Bojan Dubljevic, con 6 puntos casi de golpe, tranquilizó la hiperactividad del griego y dio otro aire a los visitantes, al menos en ataque (13-13, min. 6).
El problema estaba detrás. A poco que los de Perasovic bajaran el culo en defensa el partido se iba a acabar, pero encajar 20 puntos en el primer cuarto no era algo de lo que el croata estuviera muy orgulloso. Más bien todo lo contrario. Vladimir Lucic debutó tras cuatro meses fuera de las pistas y se le notó falto de ritmo, sin confianza, aunque el equipo no lo notó en exceso y se fue al final del primer acto por delante en el electrónico (20-23, min. 10).
Un verdadero sacrilegio era que Sinanovic no se impusiera a Dubljevic con casi 20 centímetros más de altura. El montenegrino tiraba del carro y, aun así, el Valladolid aguantaba el tirón de los ‘taronja’ como podía gracias a las penetraciones de un agresivo Drenovac. De hecho, un triple de uno de los debutantes, Lamont Mack, dio la vuelta al marcador obligando al preparador croata a solicitar tiempo muerto (28-26, min. 13).
Su relevo pronto lo tomó Omari Johnson gracias a ocho puntos consecutivos. Alarma naranja. Todos aportaban en ataque su granito de arena pero no había nadie lo suficientemente enchufado para sacar una renta consistente (34-34, min. 17). En momentos así Justin Doellman da un paso adelante y el americano cogió la sartén por el mango para ayudar a que el Valencia Basket menos intenso de la temporada se fuera al descanso con tablas (38-38, min. 20).
El rapapolvo de Peras en los vestuarios debió ser importante mas debió importarles a los jugadores poquito. Dos canastas rápidas de Pepe Pozas destrozaron el discurso del intermedio y un triple de Andjusic dio la máxima ventaja a los vallisoletanos, que empezaron a crecerse ante la evidencia del resultado (46-38, min. 22). Nada era imposible, sobre todo si ni siquiera ese toque de atención en la cancha era capaz de despertar a los ‘taronja’ del letargo.
La garra de Pau Ribas no levantó la actitud del equipo, pero evitó el hundimiento en el Pisuerga. A su vera apareció el capitán Rafa Martínez con dos triples consecutivos que devolvieron al Valencia Basket al partido mientras que en la otra canasta nadie podía frenar a Johnson (55-52, min. 27). Eso sí, sin noticias del juego interior la desventaja todavía era palpable y una técnica a Lavrinovic otorgó de nuevo la iniciativa a los de Ricard Casas (65-59, min. 30).
La alerta era ya algo más que roja. Quizás por ello, los jugadores decidieron apretar de verdad. Sato y Aguilar se pusieron el mono de faena y con el cuarto triple de Martínez la igualdad regresó al marcador (67-67, min. 32). El granadino puso de nuevo por delante a los visitantes gracias a un tiro libre, pero Andjusic no se iba a rendir tan fácilmente desde 6,75 tras haber remado tanto (74-71, min. 34).
Sin embargo, cuando la máquina ‘taronja’ carbura es imposible detenerla. Haciendo lo justo y dominando el rebote de nuevo, un parcial de 0-14 salvó los muebles en el tramo final (74-85, min. 38). Defensa e intensidad, vamos.Los cinco minutos que se tiró el colista sin ver aro fueron su tumba ante la superioridad física de los valencianos. Por los pelos, pero la vigesimoprimera cayó por su propio peso. Cualquier otra cosa hubiera sido una catástrofe (77-91, min. 40).
FICHA TÉCNICA:
77; CB Valladolid (20+18+27+12): Pozas (7), Iván Martínez (1), Andjusic (14), Omari Johnson (19), Haritopoulos (12) -cinco inicial-, Drenovac (10), Armon Johnson (5), Mack (5), Suka-Umu (4), Vilhjamsson (0) y Sinanovic (0).
91; Valencia Basket (23+15+21+32): Van Rossom (5), Rafa Martínez (12), Sato (11), Doellman (17), Lavrinovic (6) -cinco inicial-, Lafayette (10), Dubljevic (15), Aguilar (8), Ribas (7), Lucic (0) y Abia (0).
Árbitros: Martín Bertrán, Castillo y Fernández Sánchez. Eliminaron por cinco faltas personales a Pozas (min.39), del CB Valladolid.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigésimo cuarta jornada de Liga Endesa, disputado en el pabellón Pisuerga ante 4.000 espectadores.