«Pienso que los primeros 30 minutos han sido muy buenos, luego empezamos a conducir demasiado el balón y a separar las líneas. Atacábamos con cuatro y defendíamos con seis hombres», fueron las primeras palabras del entrenador del Valencia en sala de prensa, destacando los defectos que acababa de ver en sus futbolistas contra el Olympiacos.
Errores que achacó en parte al cansancio: «Acabamos de llegar de una diferencia horaria de seis horas, el equipo está cansado y en parte es algo normal». Aunque que nadie se relaje, que Djukic no acepta excusas ni tan siquiera en pretemporada. «Nos viene bien como cura de humildad porque tras el partido del Inter podíamos pensar que siempre iba a ser así. Cualquier rival te puede hacer daño si no entras al campo con intensidad y con las líneas muy juntas. Sobre todo en la segunda parte no me gustó que el equipo estuvo muy separado, algo que no se puede excusar con el cansancio, pero son detalles que tenemos que pulir y cuando recuperemos la frescura todo irá bien», explicó el serbio.
Pero si algo tuvo el Trofeo Naranja Estrella Damm fueron nombres propios como los de Banega, Hélder Postiga o el del próximo delantero que aterrizará en Mestalla. Sobre Banega, Djukic sólo tuvo palabras de elogio no sólo por lo visto esta noche, sino por su trayectoria en esta pretemporada. «Éver está muy regular, haciendo un buen trabajo para el grupo. Aporta calidad y goles, y es muy importante tener enchufado a un jugador de estas características», confesó, antes de valorar la actuación del debutante portugués: «Es importante que haya marcado para su confianza. Hemos visto que se mueve bien, que aporta trabajo y estamos muy contentos por su incorporación».
En lo que respecta al próximo fichaje para la delantera del Valencia no ha querido mojarse demasiado, aunque sí que ha desvelado que no hay prisa para traerlo «antes del comienzo de la Liga BBVA». Si será el ucraniano Yarmolenko, Djukic sólo sabe que se trata de un futbolista «con nombre de difícil pronunciación».
Ha sido una noche muy emotiva con la puesta de largo de la Academia, la presentación del primer equipo y la disputa del clásico Trofeo Naranja, pero la afición valencianista sigue siendo muy importante para el nuevo míster blanquinegro. «He vivido otra vez el empuje de la gente, que esté con su equipo. Hemos visto al campo ilusionado y esperamos estar a la altura de esta gran afición. Pensamos que tenemos un equipo para hacer grandes cosas, y todos juntos podemos hacer lograr muchos éxitos esta temporada», finalizó.