Los Valencia Firebats, equipo tricampeón de la Liga Nacional de Fútbol Americano, añadieron este pasado fin de semana en La Coruña un nuevo trofeo a sus vitrinas. Los jugadores de ‘Flag’ se proclamaron campeones de la VII Spanish Flag Bowl disputada en tierras gallegas, recuperando de esta forma el trono que les arrebató hace un año el IES Peres Vives.
A diferencia de la categoría ‘Tackle’ donde el contacto físico está garantizado, la modalidad ‘Flag’ es una forma de acercarse a conocer y disfrutar las maravillas del fútbol americano desde la base. Aquí los placajes no están permitidos y lo único que hay que hacer es arrebatarle al rival el pañuelo que tiene colgado de la cintura.
Algo que ha hecho a la perfección el equipo de los Valencia Firebats, liderado por el experimentado Fernando ‘Kelly’ Altarriba que fue designado MVP del torneo, para superar a los mejores equipos de ‘Flag’ de toda España.
La competición estaba dividida en nueve equipos repartidos por tres grupos, donde sólo se clasificaba el primero de cada uno de ellos para disputarse el título en un emocionante triangular final. Los Firebats se deshicieron sin mayores complicaciones de Camioneros Coslada por 50-6 y de los potentes Murcia Cobras por otro resultado contundente de 48-24, accediendo a una fase final con los Gijón Mariners y los Mollet Dolphins.
Fue aquí donde todavía se vio un mejor rendimiento de unos Valencia Firebats que llegaban con serias aspiraciones de ganar la Spanish Flag Bowl, pero que dieron una exhibición en los dos partidos decisivos del fin de semana en La Coruña. Los Dolphins lo pusieron difícil con el ajustado 34-20, pero en la final los valencianos fueron un ciclón que se llevó por delante la resistencia de los Mariners (60-18). Ni tan siquiera la ausencia en el equipo por razones personales de José ‘Coyote’ Albors le restó un ápice de efectividad a un grupo de jugadores que devuelven el nombre de Valencia Firebats a lo más alto del panorama nacional.
Ahora el gran obstáculo que hay que superar es el de la financiación para poder competir en Europa con los campeones de otros países. Para ello habría que concentrarse durante unos diez días fuera de España en un torneo para el que se necesitarían 5.000 euros aproximadamente, una cifra económica ahora mismo inalcanzable para los nuevos campeones de la Spanish Flag Bowl.