El calor, el cansancio, las bajas y un rival superior pudieron con el peor Valencia Basket de lo que llevamos de pretemporada. El Nizhny Novgorod venció en Godella por 65-77 demostrando ser un equipo sólido y físicamente superior al cuadro ‘taronja’, sobre todo en la pintura con unos Parakhouski (11 puntos) y Thompkins (16+9) imparables. Taylor Rochestie dominó el encuentro a la perfección y tan solo los impulsos de Pau Ribas en el segundo cuarto (15 de sus 20 puntos llegaron en ese período) y Dwight Buycks dieron lustre.
La tremenda humedad que hacía en el Pabellón Municipal de Godella hizo que el Valencia Basket empezara con el pie cambiado. Parakhouski se comió de inicio a Loncar y Kinsey se encargó de frustrar a Sato en ambos lados de la pista (4-9, min. 4). La respuesta del Valencia Basket llegó a través de un intermitente Pablo Aguilar con cinco puntos casi seguidos, pero la escasa rotación (con las ausencias por precaución de Rafa Martínez y Vladimir Lucic) pasó demasiada factura y aplatanó a los valencianos (7-15, min. 7).
Los rusos movían mucho mejor el balón y la envergadura de Thompkins también destrozaba a los de Perasovic en el poste bajo. El dato que reflejaba la falta de intensidad era que en los primeros diez minutos apenas habían cometido una falta. El hecho que lo demostraba fue el mate al contragolpe fallado por Serhiy Lishchuk. No salía nada y el conjunto ‘taronja’ se tiró más de seis minutos sin anotar. Ni la entrada de Buycks desde el banquillo logró el efecto habitual (9-23, min. 10).
El único que parecía evitar la debacle era Pau Ribas, precisamente el jugador que había descansado la pasada semana por molestias en la cadera y que no había visto minuto alguno ante el Real Madrid. Mucho más fresco, su actuación fue sublime en el segundo cuarto: quince puntos consecutivos del escolta catalán despertaron al conjunto local. También la mayor intensidad defensiva de los ‘taronja’ ayudó a mejorar en sensaciones, aunque el marcador seguía reflejando una gran diferencia (24-40, min. 17).
Romain Sato fue el tercer jugador que anotó en juego con un triple librado a falta de poco más de un minuto para el descanso. Esa acción recordó al resto cómo tirar y Van Rossom le acompañó desde la larga distancia para dejar la diferencia en 12 puntos al descanso (30-42, min. 20). Un mal menor visto lo que había ocurrido en la cancha. El Valencia Basket tenía que mejorar en su juego en transición y morder más atrás para conseguir darle la vuelta al choque.
Buycks y Van Rossom intentaron subir un peldaño la intensidad defensiva y el norteamericano decidió asumir la responsabilidad en la otra parcela. Lo consiguió durante unos minutos con sus típicos chispazos y, de camino, logró provocar a los rusos con una antideportiva más técnica posterior que acercó al Valencia Basket para alegría de la afición de Godella (42-48, min. 25). Desafortunadamente, la vuelta al banquillo del de Milwaukee apagó el fuego ‘taronja’ al mismo tiempo que Thompkins regresaba a pista para continuar con su recital particular (44-58, min. 27).
La más que evidente falta de rebote tampoco ayudó a que los ‘taronja’ pudiesen correr y los rusos consiguieron hacer la goma el resto del encuentro (48-60, min. 30). La frustración empezó a hacer acto de presencia y un triple de Rochestie congeló todavía más las esperanzas de remontada (53-65, min. 33). Luego, la intensidad atrás de Ribas provocó un parcial de 8-0 que dio falsas esperanzas de nuevo (58-65, min. 35), pero la remontada cayó en saco roto con otro pequeño arreón ruso culminado con un triple de Semen Antonov (58-70, min 36).
FICHA TÉCNICA
65.- Valencia Basket (9+21+18+17): Van Rossom (7), Ribas (20), Sato (5), Aguilar (10), Loncar (4) -cinco titular- Vives (-), Buycks (13) y Lishchuk (6).
77.- Nizhny Novgorod (23+19+18+17): Rochestie (14), Khvostov (4), Kinsey (11), Antonov (14), Parakhouski (11) -cinco inicial- Baburin (5), Daniels (-), Savelev (-), Krivosheev (-), Thompkins (16) y Golovin (2).
Árbitros: Martín Bertrán, Cardús y Aliaga. Eliminaron por faltas personales al local Vives (m.35)
Incidencias: partido amistoso disputado en el pabellón de Godella ante unos 1.300 espectadores