Las excajas valencianas recuperan el pulso

Banco Sabadell y Bankia, dos de los gigantes de la banca herederos de las cajas de ahorro de la Comunidad Valenciana, han superado con buena nota, al igual que las otras 13 entidades españolas analizadas, las pruebas de estrés realizadas por el Banco Central Europeo (BCE) y la Autoridad Bancaria Europea (EBA).
Kutxabank es la entidad que ha sacado la mejor calificación en las pruebas, seguida de Bankinter. En tercer lugar está Bankia, protagonista del mayor rescate bancario en nuestro país,marca heredera de Bancaixa, y ahora en boca de todos por las tarjetas negras de Cajamadrid.
En novena posición ha quedado Banco Sabadell, tras lograr sanear la histórica Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) cuyos últimos dirigentes ven cuestionada su gestión incluso por la Justicia. El presidente de la entidad vallesano-alicantina, Josep Oliu, ha sacado pecho en un comunicado en el que destaca «el acierto de la gestión de la entidad del balance y el capital», la vez que afirma que los resultados confirman la «fortaleza en términos de solvencia» de la entidad.
Las pruebas de estrés a las que han sido sometidos todos los bancos de la zona europea prueban la respuesta de las entidades en dos escenario hipotéticos, uno base y otro adverso.
Aunque no hay datos concretos, ante las numerosos cambios que ha sufrido la banca española en los últimos tiempos en forma de absorciones, compras o fusiones de entidades, además de Bankia y Sabadell, herederos de las clásicas cajas de ahorro de las provincias de Castellón, Valencia y Alicante, los bancos Santander, BBVA, Bankinter o Popular son las otras entidades con un mayor número de clientes en la Comunidad.
La mayor fuga de clientes en la Comunidad Valenciana tuvo su origen, según varios informes, desde Bankia, de donde se produjo un importante número de salidas que parece ya frenado con la nueva andadura de la entidad, hacia otras entidades.
Todas ellos han superado con nota las pruebas bancarias, confirmando el buen momento de la banca, por lo que -según parece- ya no será necesario inyectar más capital público. Aunque también es verdad que Rodríguez Zapatero dijo en su momento que nuestro sistema financiero era de “Champions”, y ya ven lo que pasó. Las inversiones públicas por valor de unos 40.000 millones de euros recibidas durante el verano pasado han mejorado notablemente la situación de las entidades financieras.

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