Don Felipe ha presidido en Alicante el acto inaugural del trayecto de alta velocidad ferroviaria entre Madrid y Alicante, un viaje que ha realizado junto al jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, y los ministros de Fomento y Asuntos Exteriores, Ana Pastor y José Manuel García-Margallo, respectivamente. A ellos se ha sumado en Albacete la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, y en Villena el presidente de la Comunitat Valenciana, Alberto Fabra.
El Príncipe, que ha iniciado su discurso con un saludo en valenciano, ha destacado que el modelo español de alta velocidad es una referencia en todo el mundo y «una excelente carta de presentación» para las empresas de ingeniería y construcción en su proceso de internacionalización y proyección exterior. «Debemos perseverar en la modernización, el mantenimiento y la conservación de infraestructuras capaces de actuar como palancas para la actividad económica y la creación de empleo», ha añadido.
En esa línea y «en la medida de lo posible», ha animado a seguir desarrollando infraestructuras que ayuden a mejorar la competitividad de la economía, fomenten la generación de puestos de trabajo y ayuden a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Para don Felipe, España supo subirse al tren del progreso, está haciendo muchos sacrificios para salir adelante y merece todo lo bueno que está por llegar.
«No me cabe duda de que nuestro futuro, el de Alicante, el de la Comunidad Valenciana y el del conjunto de España, se escribirá en clave de éxito si permanecemos en este empeño colectivo de superación, recuperando la confianza en nosotros mismos y convencidos de poder lograrlo», ha subrayado. El heredero ha señalado que la infraestructura inaugurada hoy es importante en un doble sentido. Desde el punto de vista tecnológico, por los avances que representa en términos de rapidez, seguridad, eficiencia, calidad y sostenibilidad, y desde el punto de vista social, porque contribuye a la superación de las desigualdades territoriales y a estimular el crecimiento económico promoviendo el desarrollo.
El Príncipe ha hecho hincapié en la aportación del AVE a Alicante al liderazgo turístico de España, que ha precisado que no se podría mantener sin unas infraestructuras como las que tiene España. Don Felipe ha recordado que la reina Isabel II inauguró en 1858 el primer ferrocarril Madrid-Alicante y ha confesado sentirse honrado de estar en un acto como el de hoy 155 años después.
Ha añadido que el Corredor de Levante que constituye el eje ferroviario de alta velocidad que une Madrid, Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana y Murcia, supone un impulso claro para la dinamización económica de estas cuatro comunidades. «Es un hecho plenamente contrastado que los proyectos al servicio de la movilidad de los ciudadanos contribuyen a la vertebración territorial de España y a la generación de riqueza y empleo. De esta manera ayudan a fortalecer la cohesión social y a mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas», ha añadido.
Ha destacado igualmente la contribución de la línea inaugurada hoy al Corredor Ferroviario del Mediterráneo, que ha señalado que es una infraestructura de gran importancia para la expansión de la industria española hacia Europa y para los puertos de la vertiente mediterránea.
Por su parte, el jefe del Consell, Alberto Fabra, ha intervenido también en el acto inaugural para recalcar que infraestructuras como el AVE y el Corredor del Mediterráneo son «punta de lanza» para reactivar definitivamente la economía.
También ha estado presente la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, aunque no ha tomado la palabra. En declaraciones a los periodistas, Castedo -a quien se ha podido ver saludando a Rajoy-, ha destacado las importantes oportunidades que abre la nueva línea tanto para su ciudad, como para la provincia y la comunidad.
Al término del acto prosiguieron las protestas en el exterior de la estación y varios miembros de la Policía Nacional han recibido el impacto de pequeñas piedras lanzadas por algunos de los manifestantes en protesta contra las políticas del Gobierno, mientras que un fotógrafo de prensa ha sido herido con carácter leve.