Jorge Lorenzo, póquer de victorias y a un solo punto de Rossi. El español firma cuatro victorias consecutivas por primera vez, mientras Márquez se despide prácticamente del título con una nueva caída.
La carrera del Gran Premi de Catalunya de MotoGP™ este domingo ha dejado una lucha más apretada en la clasificación provisional del campeonato, aunque en otro sentido ha compuesto un panorama algo más claro.
La caída de Márquez cuando rodaba segundo a rueda de Lorenzo le descarta prácticamente de la lucha por el título, aunque con once carreras aún por disputarse, nadie en parrilla está a salvo de la misma fatídica suerte que está sufriendo el campeón en título.
Tras apagarse las luces del semáforo Lorenzo se hacía con la primera plaza para no volver a abandonarla. Su cuarta victoria consecutiva llega así por primera vez en su palmarés de MotoGP™ y el mallorquín también batía el récord de 88 vueltas consecutivas en cabeza de carrera, en poder de Casey Stoner desde la temporada 2007. Ahora Lorenzo ha llevado esa cifra hasta las 103. Al mismo tiempo, el español de Yamaha igualaba las 37 victorias en la categoría máxima del legendario Mike Hailwood.
Con esta nueva victoria, Yamaha ha conseguido ganar en seis de las siete carreras disputadas hasta ahora: “Hacía mucho calor, como en general en todo el fin de semana”, declaraba Lorenzo después de bajar del podio. “Hoy era difícil igualar el ritmo del sábado. Valentino mejoraba en esas condiciones y a mí me iba un poco peor, porque pilotar con esta temperatura supone tener muchos movimientos en la moto y eso te impide concentrarte. Valentino me ha presionado bastante, pero he resistido”, aseguraba el ganador de la carrera.
La nueva situación de Lorenzo en el campeonato le deja a un solo punto del líder de la clasificación provisional, Valentino Rossi, que en Barcelona se esforzaba al máximo por dar caza a su compañero de equipo escapado.
Hubo un momento en que parecía sería posible para el italiano. Sin embargo, el español mantenía un valioso segundo de ventaja hasta a la bandera de cuadros: “Desafortunadamente, salir desde tercera línea de parrilla nos perjudica, incluso habiendo sido muy rápidos durante la primera vuelta. Después he estado siempre ahí. Tras siete carreras estamos separados por un solo punto y nuestro ritmo es similar, así que todo esto va a ser muy interesante”, concluía el líder del campeonato.
El tercer hombre en el podio era en esta ocasión Dani Pedrosa (Repsol Honda Team), cada día más recuperado de su intervención en el antebrazo tras la carrera de Qatar a principio de temporada. El español también conseguía igualar los 95 podios de Mick Doohan en la categoría máxima.
Sin embargo, su tercer puesto a casi 20 segundos del ganador no resulta la mejor de las noticias para Honda: “Estoy muy contento porque éste ha sido un proceso muy largo en el que he sufrido mucho, pero finalmente estamos consiguiendo buenos resultados; especialmente delante de nuestro público. Espero que sigamos mejorando y pilotando con mayor consistencia”, declaraba el español.
La marca japonesa había traído a Barcelona unos nuevos escapes para dulcificar en lo posible la violenta entrega de potencia de la RC213V pero, en honor a la verdad, semejante distancia sólo envía un dramático mensaje a los responsables de HRC. Por su parte, Yamaha y la incorporación reciente de su nuevo cambio de marchas seamless ha mejorado notablemente el comportamiento de su moto en las frenadas. Lorenzo y Rossi así lo demuestran.
La clasificación final ha dejado algunas agradables sorpresas en el grueso del pelotón, aunque haya sido a costa de las numerosas caídas que fulminaban las aspiraciones de Marc Márquez, Aleix Espargaró, Andrea Dovizioso y Cal Crutchlow, habituales entre los diez primeros.
Después de poner Suzuki a sus dos pilotos en cabeza de parrilla durante los entrenamientos cronometrados, tras la salida Espargaró y Viñales desaparecían del primer grupo.
Sólo Espargaró conseguía situarse tercero tras los abandonos de Márquez y Dovizioso aunque, según avanzaba la carrera, también él mismo sería víctima de una caída que terminaba con lo que hasta ese momento había sido un fin de semana de ensueño ante su público.
Quién sacaría finalmente partido a esta desordenada carrera sería su compañero Maverick Viñales. Después de terminar séptimo en Italia hace dos semanas, Viñales conseguía recuperar la compostura después de la salida.
Beneficiado por los abandonos de varios de sus rivales, el debutante de Suzuki comenzaba a recuperar terreno y mantenía una fantástica lucha con Scott Redding, más inspirado en Barcelona que nunca esta temporada. Finalmente, el español doblegaría al británico para ser sexto en meta en la que ha sido su mejor carrera desde que es piloto de MotoGP™.
En la categoría Open la victoria en esta ocasión era para el alemán Stefan Bradl (Athiná Forward Racing), que entraba en meta octavo seguido por Jack Miller (CWM-LCR Honda) undécimo.
Entre el resto de los pilotos españoles Álvaro Bautista (Aprilia Racing Team Gresini) lograba una meritoria décima plaza que no sólo le permitía puntuar de nuevo en esta difícil temporada de desarrollo de la Aprilia GP-RS, sino que también constituye su mejor resultado del año. Último terminaba en esta ocasión Héctor Barberá (Avintia Racing), décimo sexto a las puertas de puntuar.