Montesinos

El PP no tiene quien le quiera

De verdad, pero de verdad, lo que les duele a los del PP en general y a los del PP de la Comunidad Valenciana en particular es que la gente no los quiere. A los del PPCCV de Alberto Fabra, fundamentalmente a los más históricos, lo que les duele es que lo que ellos consideran buena gestión, un buen proyecto y mejores realizaciones durante los últimos veinte años queden soterrados por la idea de corrupción generalizada e incapacidad para solventar problemas. Pasarán a la historia como unos manirrotos y corruptos. ¡Que duro!

¿Con todo lo que nosotros hemos hecho, cómo pueden olvidarlo? Decía una dirigente del PPCV. Y la mujer y la compañía que la rodeaba exclamaban de la misma manera. Les jode más el desmontaje del régimen, la falta de reconocimiento de la tarea de los 20 años que el perder las elecciones. El cambio de ciclo ya está amortizado, aunque haya que mantener el tipo en las elecciones.

Hay cuatro perfiles en el PPCV:

1.-Algunos que aún tienen moral y acuden a las reuniones.

2.-Otros de la estructura institucional del poder que no se despistan mucho. Pero ya no hay temor al jefe ni nadie que ejerza el poder. Quizá porque como dice Dov Seidman, autor del libro How (Por qué el cómo se hacen las cosas significa tanto/Aguilar) si se quiere demostrar poder o conquistarlo hay que tener autoridad moral. Y de eso no abunda en la Comunidad Valenciana.

3.- Terceros que están al reparto de las migajas y entrar en puestos de salida en ayuntamientos, diputaciones o Cortes Valencianas.

4. Están los sinceros que están atentos a la regeneración del PPCV por si los impulsores cuentan con ellos/as.

5.-Y están los aprovechados que ocupan cargo y quieren perpetuarse a cualquier precio o condición (los más claros, las diputaciones)

6.- Pero fundamentalmente la élite dirigente está abatida porque van a salir por la puerta de atrás de la historia. ¿Cómo nos ha pasado esto? ¿Es que no se qué ha hecho Alberto? Todo se ha ido hundiendo y no ha hecho nada. ¿Cómo es posible que los socialistas andaluces con tres veces más imputados, deuda y mala gestión que nosotros están más considerados que nosotros? ¡¡Es que todos los días salimos en algún desastre!! ¿Qué hemos hecho mal?? ¡¡¡¿Y en Sagunto van a palos y no pasa nada!!!

Como dice la parodia del anuncio de la Loteria hecha por el Hormiguero Podemos no ha hecho nada. “Nos lo habéis dado hecho, le dice Pablo Iglesias a Mariano Rajoy. Los últimos años del PPCV han sido un desastre de gestión política. Antes era igual o peor, pero había dinero y la agenda estaba en manos del President.

Ahora la controlan jueces y periodistas. Fabra está a ver qué dice Rajoy sobre su continuidad y a salir en un par de fotos. Ni en la Generalitat ni en el partido piensan que hay que estar para otra cosa. Ah¡ ¡Eso si! Quieren convertir en mantra lo de la mayoría absoluta. Ya se sabe: el Principio de Peter.

A lo mejor ha habido dificultades de gestión por los consabidos problemas de financiación, pero para crear ilusión no se necesita mucho presupuesto. Y a los valencianos hace años que nadie nos convoca a una tarea colectiva. Solo nos convoca la furia que nos dan los políticos.

¿Y cómo vamos a confiar en unos políticos que no tienen autoridad? ¿Cuánto le hubiera durado Alfonso Grau a Zaplana después de decir las barbaridades que dijo en la rueda de prensa? ¿Y Castedo? Todos son gestos y situaciones que conducen a este deterioro. Cuando dejas de oler poder la gente deja de quererte. Te puede temer (que esa será la campaña del miedo que arrancará en breve), pero no te quiere.

Y además no han sabido conquistar amores. Los han comprado. Durante años la Generalitat gastó ingentes cantidades de publicidad en los medios de comunicación, que tenían el silencio o el butafumeiro listo. No solo es cosa de la Generalitat. También lo hace el Corte Ingles, Porcelanosa, Marina D’ Or, las marcas de coches o Mercadona, por poner ejemplos. Pero se acaba el dinero y el pesebre se queda vacio. El pesebre y la capacidad de regalar sillones. Pues leña al mono. O es que Alberto Fabra creía que lo iban a querer por su cara bonita. ¡Esto es un negoci!! Ahí tienen el ejemplo de las diputaciones de Javier Moliner, Alfonso Rus y Luisa Pastor, que no dejan de engrasar el negocio. SI el PPCV rascara por ahí e hiciera autocritica seguro que se explicaba porque la gente no los quiere (aunque los voten).

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