Recordemos que el proyecto de la apertura de Blasco Ibañez al Mar es un proyecto de una avenida que se llamó “Valencia al Mar” y se paró cuando dio de bruces con las vías del tren infranqueables. Al otro lado, unos barrios marineros poco conectados con la Ciudad, a los que se accedía a través de varios pasos a nivel. La situación cambió, se enterraron las vías y se hacía necesaria una conexión con el mar.
Con el paso del tiempo, se abrió una avenida, que fue la dels Tarongers, y la Avenida del Puerto se convirtió en un gran bulevar de acceso al mar. Pero 30 años de litigios, muchas veces por cuestiones de enfrentamiento político, dejaron al barrio con un proyecto del PP donde querían derribar fincas de toda la vida para construir edificios de lujo. A su vez, la negación de permisos de obras y mejoras dejó al barrio sumido en un caos urbanístico y lleno de solares. Con ocupaciones ilegales, delincuencia y nulo desarrollo.
Fuera del proyecto se quedó el parque “de la droga” Lorenzo de la Flor, que resiste con el diseño de hace 40 años sin cambios ni mejoras. También se olvidó ese centro social prometido en El Cabanyal, y se puso una caseta de obra como comisaría policial.
Pues bien, hace una semana salió a la luz el plan municipal donde además de quedar clara la total especulación, que de nuevo hace el gobierno municipal, encima planifican “eliminar” el único pulmón verde de grandes dimensiones, el Parque del Doctor Lluch.
Para AVANT Los Verdes lo primordial son los vecinos y no queremos convertir el barrio en una zona de hoteles y servicios para turistas y echar a los vecinos de su barrio. Lo primero es actuar sobre la delincuencia con fiscalía casa a casa, y eliminar las ocupaciones ilegales, que en su mayoría son efectuadas por mafias organizadas. Después planificar contando con los vecinos y comerciantes un barrio vivible.
AVANT Los Verdes presentó hace 15 meses un proyecto para edificar viviendas de VPO de bajo coste en el gran solar frente al Hotel de Las Arenas, para gente joven y de rentas bajas y medias. Un barrio “verde” y sostenible con amplias zonas y edificación ecológica y con un gran sótano de aparcamiento comunitario para “atraer población al barrio”. Esa es la solución, pero el Ayuntamiento y su gobierno lo tiraron a la basura y ni le quisieron echar un ojo. Nuestro proyecto tampoco fue considerado por parte de la oposición y nadie quiso recibirnos para explicarles el proyecto. Esa es la realidad.