La Diputación de Valencia va a poner en marcha por tercer año consecutivo los comedores sociales durante el verano, a través del Programa Provincial de Asistencia Nutricional para menores escolarizados de 3 a 16 años.
El Ayuntamiento de Valencia, por su parte, aprobó una partida de 750.000 euros, casi el doble que el año pasado, para atender las necesidades de manutención de 1.800 niños de familias de escasos recursos. A esto se une otra partida de 450.000 euros para ayudas a comedores escolares en verano destinadas a 3.000 niños.
Valencia se suma así a las medidas que van a tomarse en varias comunidades autónomas, diputaciones o ayuntamientos, para atender las necesidades nutricionales de los menores de familias desfavorecidas durante el verano a través de distintas fórmulas: ayudas directas, apertura de comedores escolares o cátering a domicilio.
Las ONG cifran en 500.000 los niños que en España este verano se quedarán sin comedor al cerrar los centros escolares, un asunto que se une a los datos que arroja la última Encuesta de Condiciones de Vida del INE, según la cual, en 2013, más de un tercio de la infancia de España estaba en riesgo de pobreza y exclusión.
La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ha pedido un año más a las comunidades autónomas que emprendan las acciones necesarias para garantizar la alimentación de estos menores durante las vacaciones escolares, e incluso fines de semana, para que no se vean «privados» de una alimentación adecuada ante la falta de recusos de sus familias.
Save The Children ha dicho que la apertura de estos espacios es una medida «necesaria», pero «coyuntural» e «insuficiente», y ha pedido que la atención a estos niños no se limite al servicio de comida sino que se integre en una acción educativa y lúdica. Esta organización va a poner en marcha campamentos urbanos para 4.000 niños en riesgo de exclusión en Valencia, Madrid y Barcelona.
El ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, ha apostado por que se mantengan los comedores escolares abiertos, pero ha incidido en que lo importante es garantizar que puedan darles de comer en su casa y para ello, hay que generar empleo y revisar con perspectiva de largo plazo, políticas como las ayudas por hijo a cargo, hoy «claramente insuficientes».