El Ejecutivo valenciano tendrá una «posición activa» a la hora de «exigir compensaciones, las máximas posibles y a través del Gobierno de España», para el sector agroalimentario valenciano como consecuencia del veto de Rusia a los productos agrícolas y alimentarios procedentes de la Unión Europea y Estados Unidos. No obstante, se ha mostrado «prudente» por lo que respecta a «cuantificar el efecto de esta crisis» hasta conocer «el alcance de las sanciones» rusas.
Así lo ha indicado este viernes la portavoz del Consell, María José Català, durante la rueda de prensa posterior al pleno del Consell celebrado esta jornada, preguntada por las acciones que tiene previsto llevar a cabo la administración autonómica para que ese veto tenga el menor efecto posible en la Comunitat Valenciana.
Català, que ha precisado que en 2013 el sector agroalimentario valenciano exportó 151 millones de euros a Rusia, ha señalado que «el bloqueo de las exportaciones es un problema que trasciende al ámbito de competencia del Gobierno valenciano».
Tras ello, ha apuntado lo «importante» de tener «prudencia» en este momento «a la hora cuantificar el efecto de esta crisis» y de esperar a conocer «el alcance de las sanciones decretadas por el Gobierno de Rusia».
«El gobierno de Alberto Fabra va a actuar con prudencia a la hora de emitir esos datos. Hay que ser prudentes porque desconocemos en este momento cuáles son las medidas concretas y las sanciones decretadas por el Gobierno de Rusia», ha planteado la consellera.
A pesar de ello, ha afirmado que el Consell tendrá «una posición activa para exigir compensaciones, las máximas posibles y a través del Gobierno de España, para el sector agroalimentario valenciano». «Vamos a pedir compensaciones al ámbito europeo a través del Gobierno de España»,. ha dicho.
Preguntada por el modo en el que se articulará la petición de esas compensaciones, María José Català ha explicado que la Generalitat va a pedir «al Gobierno del Estado que estudie medidas de compensación de los posibles efectos adversos que tenga esta crisis en el sector agroalimentario» de la Comunitat. Ha recordado que con la administración central «se están trabajando dos órdenes de ayuda al sector agroalimentario valenciano».
La responsable autonómica ha precisado que lo que se va a hacer es «analizar las consecuencias negativas sobre el sector agroalimentario que pueda tener esta circunstancia» del veto ruso y, tras ello, cuando se tengan «los datos fiables», se conozca «el decreto de sanción del Gobierno ruso» y estén «cuantificadas esas pérdidas», pedir al Ejecutivo central que las «compense a nuestro sector agroalimentario».