La subasta más alocada de Valencia dice adiós

La Gran Subasta de cachivaches asentada en Benimaclet se despide. «Han sido ocho años fantásticos y 25 granes subastas», tal y como explicó a VLC News el artífice y director de la fiesta, Alejandro Portaz. Y la razón: «hay que renovar ideas, hay que renovar eventos y dar paso a las nuevas generaciones». Y lo dice un joven creador incansable de proyectos e historias, actor de improvisación y al frente de la productora Videotú.

Así, este domingo, 30 de marzo de 2014, a las 19.30, tendrá lugar el local en En Babia (calle Reverendo Rafael Tramoyeres, 6) del barrio de Benimaclet la última cita para aquellas personas que quieran desprenderse de objetos muy antiguos o muy nuevos, que lleven aparejados recuerdos para olvidar o que, por el contrario, no gocen de ninguno. Todo tiene cabida y todo es posible en un desternillante espectáculo, una experiencia que lleva por bandera la «filosofía del reciclaje» y el buen humor.

En este tiempo han sido 1.480 los objetos vendidos y para la ocasión se ha realizado un vídeo de testimonios de algunos de los participantes, como el de Rebeca, una joven que se estrenó en el primer «encuentro subastero» en 2007. «Asistió a nueve subastas, vendió dos literas con colchón por menos de 5 euros, subastó el primer lote de 15 cinturones unisex» y llegó a acoger la tercera edición de la Gran Subasta en su propio piso.

O el de Laura, que subastó 164 objetos, «invirtió casi 20 euros en la compra de 45 enseres útiles, vendió unas gafas de sol por 2 céntimos y su mejor adquisición fue un pijama de satén». También fue anfitriona de una de las subastas, la cuarta para ser exactos, celebrada en su terraza.

Jano, por su parte, «ganó 28 euros vendiendo toda su infancia. Gastó 29 euros en artículos», adquirió una guitarra nueva por 50 y subastó tres videoconsolas.

La experiencia de Inés es de las más extensas ya que ha participado en 15 ediciones desde 2010 durante las cuales ha conseguido vender 125 artículos, entre ellos «un cenicero de pie con estampado de vaca» y logrando ganar 95,6 euros en cuatro años».

Jesús asistió como vendedor a seis subastas, desprendiéndose de su equipo de buceo y tres peceras. También aprovechó dos mudanzas para reciclar y llegó a sacar a la venta 20 electrodomésticos.

Ir arriba