Preservativos, sexual

Montón desarrollará una Ley de Salud Sexual Integral que enciende a los colectivos provida

La conselleria de Sanidad desarrollará una Ley de Salud Sexual Integral de la Comunitat Valenciana que recogerá su apuesta por el derecho a la libertad, la diversidad y a la salud sexual; a la educación sexual y a la anticoncepción; a la maternidad libre y responsable y a la interrupción voluntaria del embarazo y a la protección de toda persona ante cualquier forma de violencia sexual y de género.

Así, lo ha señalado este viernes la portavoz del Consell, Mònica Oltra, en rueda de prensa para informar de los asuntos tratados en el pleno del Gobierno valenciano, en el que se ha aporbado una declaración institucional con la que se suma a la celebración del «Día Europeo de la Salud Sexual» que se celebra el 14 de febrero.

Además, ha destacado que la Conselleria de Sanidad Universidad y Salud Pública ha garantizado ya el derecho a los tratamientos de infertilidad para todas las mujeres. Así mismo facilita la píldora postcoital de forma gratuita a través de los Centros de Salud Sexual y Reproductiva de la Comunitat.

Según recoge este manifiesto, «es intención del actual gobierno de la Generalitat seguir incrementando las actividades asistenciales, preventivas y de promoción, en el ámbito de la Salud Sexual pública y de calidad, para cumplir la definición de salud sexual de la OMS, que es un estado de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad; la cual no es solamente la ausencia de enfermedad, disfunción o incapacidad».

Así mismo, señala que la información sexual, la educación, y la promoción en salud sexual de la personas sigue siendo una asignatura pendiente en España. Por eso, el propósito de la Generalitat es «una defensa firme de la Salud Sexual como parte integrante de los derechos humanos fundamentales y universales que defendemos, para que el conjunto de la ciudadanía podamos disfrutar de ellos con plenas garantías».

En este sentido, ha explicado que el Consell va a favorecer y apoyar campañas específicas de sensibilización e información sexual, que vayan más allá de la prevención de riesgos asociados al comportamiento sexual, que se centren «en la construcción de referentes culturales y simbólicos que favorezcan un concepto de la sexualidad integral y multidimensional» y que, por tanto, «generen un espacio para una sexualidad saludable para todas las personas y en todos los ciclos evolutivos de la vida, más allá del modelo biomédico».

En ese sentido, ha recordado que desde el año 2003, la Alianza Europea para la Salud Sexual (ESHA) insta a las administraciones públicas y asociaciones ciudadanas a sumarse a esta iniciativa para promover la Salud Sexual y de este modo concienciar y sensibilizar a hombres y mujeres, sobre la necesidad de adquirir y mantener hábitos sexuales saludables.

 

Refrendo de la declaración de derechos sexuales universales

La Organización Mundial de la Salud (OMS) refrendó en 2010 los «Derechos sexuales Universales» que se redactaron en Valencia, en 1997, por la Asociación Mundial para la Salud Sexual (WAS), en el XIII Congreso Mundial de Sexología.

Estos derechos quedan enmarcados dentro de los derechos humanos que ya están reconocidos en las leyes nacionales, internacionales y otros acuerdos sobre esta temática.

Según la OMS, «la sexualidad es inherente a todo ser humano, por eso no sólo está presente en las personas jóvenes, también forma parte de la vida del resto de ciudadanía: menores, adultos, personas de edad avanzada, o aquellas otras con necesidades especiales. Lo único que varía es la expresión de esa sexualidad que es diferente en cada persona y más entre las diferentes edades y culturas».

La promoción de la Salud Sexual y de los Derechos Sexuales contribuyen a lograr una sociedad más justa para todas las personas. Por eso, la WAS insta a trabajar en la justicia relacionada con la salud sexual y los derechos humanos para todas las personas independientemente de su orientación e identidad sexual.

Desde mismo modo, desde la Generalitat se considera que se requiere un «enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener relaciones sexuales placenteras y seguras, libres de coerción, discriminación y violencia».

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