La concentración que han promovido este jueves delegados de UGT PV y CCOO PV ante la sedes de la Delegación del Gobierno para reivindicar la libertad de ejercer el derecho de huelga y exigir la retirada de la conocida como ‘ley mordaza’, ha provocado destrozos en las fachadas de un centro comercial de la calle Colón. Varios escaparates han terminado con cristales rotos y pintadas en las paredes. Cerca de un millar de personas han acudido a este encuentro.
En esta jornada de acción mundial convocada en defensa de las libertades y del derecho de huelga, los sindicatos reclaman la retirada del Proyecto de Reforma del Código Penal, la derogación del artículo 315 y la modificación de la Ley de Seguridad Ciudadana.
En declaraciones a los periodistas, el secretario general de CCOO PV, Paco Molina, ha criticado que «el resultado de las reformas estructurales del Gobierno del PP es una pérdida manifiesta de derechos fundamentales como el de huelga o el de poder participar de manera activa en manifestaciones y piquetes informativos, hasta el punto de que hay 90 casos abiertos en España de carácter penal y administrativo que afectan a 300 sindicalistas, 29 de ellos en el País Valenciano, 14 en Alicante y 15 en Valencia», ha precisado.
Ha reprobado asimismo que «como cualquier estrategia ideológica, política y económica, no va sola, sino acompañada de otras medidas como la reforma del Código Penal, cuyo artículo 315.5 determina prisión para estas personas».
«RETROTRAE A LA ESPAÑA DEL BLANCO Y NEGRO»
Para Molina, eso «retrotrae a la España del blanco y negro», con una «versión moderna» de «la época más oscura y más negra de este país dando facultades de alternación del orden público», y supone un intento del Ejecutivo estatal de «parar el clamor en las calles de una sociedad a la que han arruinado, empobrecido, descohesionado y están arrebatando todos y cada uno de los derechos».
Su homólogo de UGT PV, Gonzalo Pino, ha afirmado que «tratan de penalizar el derecho fundamental a la huelga», así como «el derecho de los pueblos a manifestarse contra sus gobernantes ante políticas neoliberales que van contra los derechos de los ciudadanos».