Ximo Puig ha prometido este domingo su cargo como presidente de la Generalitat en el pleno de las Corts, de modo que ya es el nuevo jefe del Consell, el sexto desde el inicio del autogobierno valenciano, el segundo socialista tras Joan Lerma.
Tras ser investido ‘president’ el pasado jueves y después de su nombramiento por el Rey, Puig, ante el pleno de las Corts, ha prometido su cargo y acatar el Estatuto de Autonomía de la Comunitat Valeciana. A continuación, ha realizado una proposición sobre su programa de gobierno.
Al acto han asistido, entre otros invitados, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez y el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con los que el presidente de la Generalitat ha atravesado las puertas de Les Corts a las 10:45 horas. Ha destacado también la presencia del ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García Margallo.
También han estado presentes Joan Lerma; Francisco Camps; Miguel Iceta, de PSC; Carmen Alborch; Ángel Gabilondo; Cándido Méndez, secretario general de de UGT; Grisolía; el expresidente Eduardo Zaplana; Héctor Villlalba, quien, recordamos, también fue presidente, además de otras personalidades del mundo institucional, de la política, de la economía, la educación y la sociedad civil.
Puig ha arrancado su discurso hablando en valenciano. En la introducción, ha remarcado que el viejo pueblo valenciano es “un pueblo con mucho más de 32 años” de historia, pero fue en 1983 el inicio histórico de nuestro autogobierno democrático. “No es un pueblo subyugado, como le dijo Vinatea al Rey”, “porque no hay país sin libertad”.
El Presidente ha tenido palabras también para todas las familias que han llorado a sus muertos este pasado viernes en los atentados de Túnez, Francia y Kuwait, “asesinados por la intolerancia, abatidos por el fanatismo, muertos por el nuevo fascismo del siglo XXI”.
Por otro lado, ha querido destacar en su intervención algunos datos sobre sus orígenes: “Soy nieto de republicanos que, como decía Antonio Machado, solo querían un gobierno honrado y para el pueblo”, “soy hijo de un autónomo y de una mujer que, como tantas, ha trabajado toda la vida y no tiene pensión”, y ha destacado que fue el primero de su familia en poder ir a la Universidad.
Puig ha definido su gobierno como un gobierno que “estará presidido por el diálogo”, no solo entre partidos, sino también con toda la sociedad.
Un punto muy destacable en su discurso ha sido cuando se ha dirigido al Ministro Margallo, el único representante del Gobierno central en las Cortes. Puig ha anunciado una relación con el gobierno de España “exigente, leal y solidaria”, “que nos saque del trato discriminatorio y de la actual marginalidad”. Porque, como ha manifestado el Presidente, “la lealtad entre españoles tiene que ser en los dos sentidos: de la Comunitat al resto de España y del resto de España a la Comunitat”. Para que no haya lugar a duda, ha aclarado que no tolerará «ninguna discriminación más, ni en financiación económica ni en inversiones”.
Ximo Puig ha prometido que será “el Presidente honrado de un pueblo honrado”, “el Presidente dialogante de un pueblo de palabra”, “el Presidente de un pueblo valiente ante las injusticias”, el Presidente que unirá a todos los valencianos: “Coseremos todos los territorios desde Pilar de la Horadada hasta Vinaroz”.
Por último, ha recordado las palabras de Jaume I escritas en su testamento: “Amar y proteger a todas las personas y al pueblo. Hacer reinar la justicia y velar que los grandes no opriman a los pequeños” y ha finalizado proclamando que ese es el mandato de su presidencia.
Tal y como apuntaban minutos antes del discurso de Puig, algunos integrantes del PP se han levantado en señal de respeto cuando el Presidente ha finalizado su discurso, pero no han aplaudido. Sí han aplaudido Fabra, Català, Moragues y Buch. El resto, siguiendo la indicación de Isabel Bonig, no lo han hecho.
En declaraciones a los medios tras la toma de posesión de Puig en las Corts,Margallo ha sido preguntado por el sistema de financiación, y ha declarado que le parece injusto pero que en este momento es complicado modificarlo. Además, ha recordado que él mismo ha defendido que el sistema de financiación autonómica que el Gobierno de Mariano Rajoy heredó del de José Luis Rodríguez Zapatero «discriminaba y discrimina a la Comunidad Valenciana».
Morera, por su parte, ha aprovechado para insistir en que no entrará en el Consell si no se acepta su propuesta de consellers, en relación a Gràcia Jiménez.