El Ejecutivo ha dado luz verde al Plan Integral de Apoyo a la Competitividad del Comercio Minorista 2013 con el objetivo de revitalizar el pequeño comercio, uno de los colectivos del sector más perjudicados por la crisis y que a nivel nacional concentra el 15% de empresas y emplea a 1,8 millones de personas. En la Comunitat Valenciana las pymes y autónomos forman el 41,4% del tejido empresarial y emplean al 52% de los trabajadores, mientras que las grandes superficies representan el 15% y dan trabajo al 8,8%.
Desde Cecoval, la Confederación de empresarios del Comercio Valenciano, afirman que toda iniciativa de apoyo al sector es positiva pero expresan su “recelo” ya que las medidas aún no se han concretado. En esta línea, esperan que el Plan sea algo más que una lista “de buenas intenciones” y temen que al final se queden en “papel mojado”.
En este sentido, Rafael Torres, vicepresidente de la confederación, critica que la inversión de 30 millones para facilitar la liquidez del sector que lo forma cerca de dos millones de empresas es una cantidad “simbólica y escasa” pues apenas se destinaría 60 euros por comercio. Además, Torres asegura que hasta que no crezca el consumo, las pymes no van a invertir en innovación porque “no se la van a jugar hasta que no se incremente la demanda”.
En este sentido, desde la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunitat Valenciana, Covaco, expresan su temor a que el Plan se quede sólo en “titulares de libro” y piden “medidas concretas» y no «buenas intenciones”.
En este sentido, Amparo Barroso, gerente de Covaco señala que en el momento actual,”la medida fundamental para potenciar el sector del comercio-y todos los sectores- es la creación de empleo para que las familias tengan más ingresos y derive en un aumento del consumo en los comercios”. Y añade que facilitar el acceso a la financiación “está muy bien”, pero “si los comercios no vendemos no necesitamos pedir financiación para comprar más, innovar o contratar a un empleado”.
El problema, explica Barroso “radica en una escasez de las ventas, por ello las medidas tienen que ser mucho más amplias de miras para después ir al detalle” En esta línea sentencia que “de los titulares a la forma que después den al procedimiento para cumplir lo dicho está la clave de que el plan sea efectivo o no. Queremos la tangibilidad de este Plan, más allá de buenos titulares”.
Entre las medidas de la nueva iniciativa presentada el pasado viernes destaca la modificación del Fondo de Ayuda al Comercio Interior con 28,68 millones de euros para facilitar la liquidez a los empresarios para gastos corrientes. La propuesta recoge diez aspectos fundamentales para el sector como fomentar la innovación y la competitividad, avivar la apertura de centros comerciales, el apoyo financiero, la promoción comercial y la reactivación de la demanda, el impuso del relevo generacional, el turismo de compras, la mejora de la seguridad, la eliminación de barreras administrativas y la internacionalización.