Los valencianos más solidarios

La Asociación Valenciana de Caridad reconoció ayer en un multitudinario acto en la Fundación Bancaja a los valencianos más solidarios en la tercera edición de los Premios Casa Caridad.

La Fundación Patrimonio Benéfico Marqués de Dos Aguas por su trayectoria solidaria, en la modalidad de Compromiso Social, y Consum, en reconocimiento a sus programas de Responsabilidad Social Corporativa y su ética empresarial, en el apartado de Responsabilidad Empresarial, encabezan este año en la lista de los más solidarios.

El Premio a la Fidelidad se ha otorgado a la Federación Valenciana de Empresarios Transportistas, que desde los años 50 dedica el día de su patrón a ayudar a Casa Caridad; el Premio a la Difusión, a la Cadena Ser por el apoyo de la emisora en la difusión de la labor social de la asociación, y el Premio al Voluntariado a José Perea, por su labor desinteresada de ayuda a esta entidad durante cuatro años. Además, se ha entregado un Premio Especial a la Once por estar al lado de los discapacitados y el trabajo desde su creación.

El presidente de la Asociación Valenciana de Caridad, Antonio Casanova, confió en que estos reconocimientos «sirvan para poner en valor la colaboración» y como «ejemplo para otros» para fomentar «el espíritu solidario del pueblo valenciano».

Asimismo, ha considerado que estas distinciones son «prueba» de los «miles de donantes y voluntarios que creen en el proyecto» de la Asociación Valenciana de Caridad, una entidad «privada, transparente y plural» con 108 años de existencia.

Casanova reclamó, en presencia del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, y de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, a la administración «mayor austeridad, ejemplaridad y eficiencia en el gasto» para poder seguir ayudando a las personas que más lo necesitan y pidió que se apliquen «las reformas necesarias que liberen recursos a favor» de este colectivo.

Esta entidad, dijo, «necesita de un mayor compromiso y esfuerzo económico de los sectores públicos, que en su acción de gobierno deben apoyar a quienes ofrecen garantía de buen hacer y transparencia probada».

En los últimos cuatro años, la asociación ha realizado más de 1,4 millones de atenciones con una inversión de 13,5 millones de euros.
Para Casanova en Valencia existen «suficientes recursos públicos y privados para atender las necesidades básicas de alimento y albergue» de las personas desfavorecidas. «Es difícil que alguien pase hambre» en nuestra ciudad y «decir lo contrario es ofender a la generosidad de todos los valencianos».

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