Ollería ofrece un turismo de descanso y de montaña de mano de Blanco Ibiza. La casa rural se encuentra en el enclave del Valle de Albaida, con instalaciones de ambiente ibicenco enfocadas a un tiempo de relax.
Camas balinesas, jacuzzi, piscina con formas caprichosas, hilo musical… estas y muchas más son las prestaciones que ofrece Blanco Ibiza. Rubén Bartas, gerente del alojamiento, ha compartido en el programa ‘Comarques’ de News FM su experiencia en la isla blanca años atrás. “Me inspiré totalmente en Ibiza y su ‘rollito’ para decorar la casa y las zonas comunes”, asegura Bartas. La capacidad total es de 16 personas, distribuidas en dos estancias, una para nueve personas y otra para siete. “Suele alquilarse la casa entera, aunque en ocasiones ha habido grupos más reducidos”, afirma su gerente. Este es un espacio idóneo para celebraciones especiales de cumpleaños, despedidas de soltero, amigos, familiares… “y que vienen de todas partes de España, incluso de fuera”, sentencia.
Para aquellos que deseen pasar más tiempo dentro de la casa, pueden hacerlo sin problemas ya que hay zonas con paelleros, barbacoa y una pista de bádminton. “Antes teníamos bicicletas de montaña, pero la gente va a descansar y estaban prácticamente siempre sin usar”, comenta Bartas. Blanco Ibiza dispone de cocina interior, cocina exterior, mesas grandes para grupos y un parking a la sombra de grandes árboles.
Blanco Ibiza ofrece un turismo alternativo, el turismo de descanso, a pesar de la proximidad a localidades con mucha afluencia de visitantes como son Xátiva, Ontinyent o l’Ollería. Xátiva con su castillo histórico, las terrazas o los paseos por la ciudad. Ontinyent con el paraje natural “Pou clar”, donde se pueden visitar nacimientos de agua. Por parte de Ollería, es la ciudad del vidrio, por lo tanto pueden hacerse visitas guiadas por las fábricas o también disfrutar de sus fiestas de moros y cristianos en verano, que hacen más atractivo este alojamiento.
La celebración de grandes eventos en el recinto también está permitida, teniendo una capacidad de hasta 200 personas. Podría modificarse el hilo musical de la casa por la música que elijan los huéspedes y los precios resultan económicos al tener tanto espacio para tanta gente. Sin duda un complejo turístico rural rodeado de un paraje natural que no tiene desperdicio.
FOTO: Web Blanco Ibiza