Esquerra Unida, a través de su coordinador en la Ciudad de Valencia, Marco Fornés, ha instado al equipo de gobierno del cap i casal una política más activa ante la proliferación de apartamentos ilegales.
Para ello, Forés plantea la «creación de equipo de inspección» y para ello propone que sus integrantes sean miembros la Agència Valenciana de Turisme y miembros de la policía local de Valencia.
Para la formación de Fornés no se plantea petición de endurecimiento como contraprestación a los grandes empresarios u hoteles de la ciudad. «No hay que entenderla como una norma de competencia desleal para la patronal del sector hotelero ni como una actividad en la que se produce fraude fiscal, sino como actividades que son molestas para el resto de vecinos.
El trabajo conjunto de la AVT y la policía municipal permitirá la recopilación de las quejas y las denuncias que los ciudadanos hagan al respecto.
A su entender «los residentes ven cómo sus edificios y calles se convierten en un lugar de juergas nocturnas para visitantes extranjeros que rompen el descanso y perturban el normal desarrollo de la vida familiar». Para Fornés «ésto lleva a que en algunos barrios se acrecente. En el centro histórico las parejas que tienen sus hijos en rango de edad escolar deciden fijar fuera su residencia habitual. «Un efecto que contribuye a la despoblación y el deterioro», ha remarcado el coordinador de EU en Valencia.
Marco Fornés solicita a la Agència Valenciana de Turisme y a la policía local que sean ellos los que «se encarguen de inspección los pisos ilegales, ya que los agentes de la policía de la Generalitat -que son los que habitualmente realizan este trabajo»- son escasos y su zona de actuación es extensa e impiden una actuación continuada y eficaz que atienda con prontitud las quejas y las denuncias de los vecinos afectados».