Armando Corbalán vive su momento más dulce en el Levante B. Después de trabajar mucho en los entrenamientos, el joven ‘stopper’ se ha ganado la titularidad en el centro del campo. Incansable dentro del terreno de juego, el medio centro lleva escalando categorías en la escuela granota desde hace mucho tiempo. A pesar de la mala situación que vive el filial, el centrocampista es optimista y mira hacia el futuro con esperanza. Si le preguntas, Amando lo tiene claro: el filial, se salvará sí o sí.
Partido clave este fin de semana frente al Atlético Baleares…
Es un partido en el que tenemos que ir a muerte, es importantísimo sacar los tres puntos. Cada vez quedan menos partidos para que acabe la temporada y tenemos que salir de los puestos de descenso.
¿Es el mejor momento para enfrentarse a uno de los mejores equipos de la categoría?
Contra los equipos que están en la zona de arriba siempre hemos hecho buenos partidos. No los hemos ganado todos pero siempre hemos dado la cara. Un punto sería importante, pero nosotros vamos a luchar por sacar los tres porque es lo que nos va a dar de comer a partir de ahora.
¿Cómo está el equipo a nivel anímico sabiendo que jornada tras jornadas estáis viviendo en el descenso?
El equipo está muy confiado, además el vestuario está unido, hay muy buen rollo. Todo el mundo está trabajando duro en los entrenamientos y ahora más que nunca tenemos que estar unidos para sacar esto adelante.
Se puede sacar esta situación hacia delante…
Claro que se puede, y más con el equipo que tenemos. La posición que ocupamos en la tabla no refleja la calidad que tiene la plantilla, el equipo está confiado y lo vamos a sacar seguro. Si hay un equipo que en los momentos difíciles saca las castañas del fuego y va a por todas ese es el Levante. No hay ninguna duda de que lo vamos a sacar.
Su situación ha cambiado de forma drástica. Comenzó sin jugar y ahora es indiscutible en el once. ¿Cómo se siente física y mentalmente?
Estoy contento, estoy contando con minutos. El mister me ha dado la confianza y confía en mí. Yo voy a dar lo máximo en el campo y devolver la confianza que ha depositado en mí
Por lo que se ve en el campo, parece que ha vuelto al once con mucha confianza
La confianza afecta mucho al rendimiento del jugador. Un futbolista con confianza y otro sin ella, son dos personas totalmente distintas. Hay que tener la cabeza muy bien amueblada, siempre fría y cuando te llegue la oportunidad dar lo máximo.
Para Armando, ¿Cuáles son las claves para que el filial logre la permanencia?
La principal clave es que el equipo esté junto, esté unido y le echemos más ganas que nunca. Si el equipo está unido, vamos todos a una y convencidos de que lo vamos a sacar, estoy segurísimo de que iremos hacia delante. Tenemos que estar más juntos, defensivamente hemos mejorado en los últimos partidos. Siempre solemos tener ocasiones, en el último encuentro no se dio el caso y no pudimos marcar gol. Pero estamos convencidos que llegarán y que podremos salvar la temporada.
Usted tiene un récord. Jugó todos los partidos con el Levante en División de Honor y no le sacaron ni una sola amarilla. Siendo medio centro defensivo, ¿Cómo se consigue eso?
Más que nada era posicionamiento táctico. Saber cuando tienes que entrar, cuando no, saber cuando tienes que hacer las faltas y donde. Ser un poco listo, eso en el fútbol te vale bastante.
Eso de que no te saquen amarillas, es más complicado en Segunda B…
(Risas), la verdad es que en esta categoría hay que rascar más. En División de Honor te daban más margen a la hora de dar alguna patada, es acostumbrarse al ritmo y saber ser inteligente.
En el último partido volvió la dupla Camarasa – Armando, esa que tantos éxitos le dio al Juvenil A
‘Cama’ es un magnífico jugador, lo ha demostrado en el primer equipo y en el filial. Nos complementamos bien, sabemos que tenemos que hacer cuando jugamos los dos. Estoy contento de tenerlo como compañero
En el partido frente al Prat, estuvo a punto de marcar…
Estuve a punto, la tuve ahí pero me la sacó el portero. Si marcas un gol como no te va a dar alegría y más en Segunda B. No pudo ser pero bueno, ojalá se de la oportunidad más adelante.
¿Ha pensado alguna vez en ese momento, en el que ve como un balón suyo a besado las redes?
Loco no me volvería, se lo dedicaría a mi padre porque siempre ha estado ahí. Me haría mucha ilusión pero nunca he pensado nada.
¿Le ha costado mucho adaptarse a la categoría de bronce del fútbol español?
Es difícil adaptarse, el paso de División de Honor a Segunda B es bastante grande. Te cuesta al principio coger el ritmo, pero al final lo sacas y se puede.
¿Es difícil, ir cada día a entrenar sabiendo que no vas a ir convocado, que no vas a jugar?
Si tú sientes lo que es el fútbol, trabajas día a día, con la cabeza fría y sabes lo que tienes que hacer. Vas a estar ahí hasta que te lo ganes y cuando tengas la oportunidad vas a pelear para aprovecharla.
Su capacidad de aprender y de mejorar, es una cualidad que valoran mucho los técnicos que lo han entrenado
Si la valoran me siento alagado. Nadie es perfecto ni existe la perfección, todos tenemos un margen de mejora. Hay que currar, trabajárselo, preguntar dudas porque siempre se puede mejorar.
Viendo la situación del equipo, ¿Cómo están los ánimos en el vestuario?
Tienes el nerviosismo de ver el calendario y ver que cada vez quedan menos partidos. Pero por otra parte, el vestuario está tranquilo. Todos pensamos que el equipo va a ir hacia delante. No pensamos en la posición que ocupamos en la tabla, solo en trabajar para sacar esto hacia delante.
Un resultado para el partido en Baleares…
Pues, portería a cero. Y cero uno o cero dos, eso me da igual, solo ganar.
Foto y vídeo: Diego Martínez/VLC NEWS