El futbolista visitó al filo de la una del mediodía las oficinas de la entidad, sitas en la Plaza de la Afición, junto al estadio de Mestalla. Apareció en un monovolumen con los cristales traseros tintados, conducido por su chofer. En el asiento del copiloto estaba la hermana del jugador, Rami, que gestiona desde hace unos meses los asuntos del futbolista en calidad de representante. El central, acompañado por uno de sus asesores, estaba en el asiento trasero.
Una vez reunido con Amadeo Salvo, el director general Luis Cervera, el director deportivo Braulio Vázquez y el director de comunicación Damia Vidagany, el jugador ha recibido la notificación oficial de la apertura de su expediente disciplinario. El futbolista ha ofrecido a los dirigentes su versión de lo ocurrido hace 72 horas, cuando sus polémicas declaraciones le costaron ser expulsado del hotel de concentración del equipo en Valencia y desconvocado de la citación.
La medida cautelar que le ha impuesto el Valencia al jugador francés supone la suspensión de empleo al futbolista, que en un plazo de entre cinco y quince días hábiles podrá presentar alegaciones respecto esta decisión del club. Mientras tanto, Rami no puede acudir a la Ciudad Deportiva de Paterna para ejercitarse junto al resto de sus compañeros hasta que se le imponga una sanción definitiva.
El Valencia, en su expdiente sancionador, califica la acción de Rami como falta muy grave, y aunque en el régimen interno de la entidad se contempla la opción de privarle también de su sueldo, hasta que no finalize el conflicto y se estudien las posibles alegaciones que presente el futbolista no se podrá tomar esta medida, de acuerdo con lo que dicta la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles).