Un 17 de noviembre de 1993, nació en Tulsa (Oklahoma) John Neeskens. Su padre, Johan Neeskens, fue uno de los mejores jugadores de la historia del FC Barcelona. Medio centro que jugó cinco temporadas en el cuadro catalán (1974-1979). Ahora es su hijo pequeño el que lucha cada fin de semana por triunfar en el fútbol. Por ahora, lo hace muy lejos de las fronteras españolas.
Quedan ya muy lejos sus inicios en el fútbol. John comenzó en una de las mejores canteras de Catalunya, la Damm. La secretaria técnica del Villarreal se fijó en él y lo captó para su escuela. El submarino amarillo le ganó la partida al Real Madrid que también pujó por su fichaje. Allí jugó en el Juvenil División de Honor con el que ganó la Liga por delante del Valencia y del Levante.
Dicha experiencia le ayudó a crecer como futbolista. Un Neeskens más maduro en lo deportivo dio el salto a Segunda División B. Pasó por las filas del Sant Andreu y del Badalona donde tuvo actuaciones destacadas. Su consolidación en la categoría de bronce del fútbol español hizo que la MLS se fijara en su fútbol.
Ahora milita en el Colorado Rapids junto a otros futbolistas españoles en dicho campeonato. Tras unos días de descanso, el carrilero zurdo comienza de nuevo la pretemporada con el objetivo de mejorar las metas marcadas el año pasado. A pesar de contar con el interés de varios conjuntos europeos, Neeskens seguirá contando con minutos en EEUU para crecer como profesional del deporte rey.