El Valencia Basket quiso marcar diferencias desde el inicio. Sin concesiones y aprovechando la floja defensa donostiarra, los de Perasovic percutían en la pintura con facilidad y el dominio del rebote permitió tomar las primeras ventajas en el marcador (13-4; min. 6). A pesar de que ambos conjuntos estuvieron dos minutos sin anotar, el escaso acierto desde la línea de tres del Gipuzkoa condenaba a los visitantes a ir a remolque. Rafa Martínez y Serhiy Lishchuk eran los más destacados de los locales, mas el poderío taronja versaba en el hecho de que hasta siete jugadores habían visto aro al final del primer cuarto (23-10; min. 10).
Sito Alonso no sabía por donde atajar la sangría. Seis puntos consecutivos de Justin Doellman al inicio del segundo acto rompieron definitivamente el partido…y todavía quedaban 28 minutos para la conclusión del mismo (29-10, min. 15). Una superioridad aplastante que empieza a ser habitual en La Fonteta. Los valencianos marcan el ritmo cuando y como quieren, aprietan cuando es necesario y se relajan cuando la diferencia es cómoda.
Hicieron lo mismo en el encuentro de presentación y todo indica que será la tónica esta temporada. Tampoco es que el GBC aprovechara las pocas oportunidades que tuvo (31-17; min. 14). Los vascos amenazaron con reengancharse al partido con un parcial muy tímido, pero en cuanto el Valencia Basket volvió a mostrarse sólido en ataque con Aguilar y Dubljevic abriendo la cancha con su letal tiro exterior, el partido regresó a su cauce normal (42-25, min. 20).
El tercer cuarto repitió la también ya típica pájara ‘taronja’. Afortunadamente, bastó con recurrir a la contundencia de Lishchuk para que el parcial de 4-10 en contra no hiciese tanto daño como el de la semana pasada en el Palau (46-35, min. 22). A la fiesta se unió Van Rossom, que dirigió a sus compañeros a la perfección para recuperar la renta en un abrir y cerrar de ojos. No solo eso, sino que un triple de Lucic y un contraataque acabado en mate por el tractor ucraniano dieron la máxima hasta ese momento (62-35; min. 26).
Todo estaba resuelto y Dubljevic levantó a la afición con dos triples consecutivos que minimizaron el acierto de Jason Robinson (10 puntos en apenas cinco minutos), muy motivado por su regreso a La Fonteta (70-47, min. 30). Sin historia, los últimos minutos sivieron para que el montenegrino se llevara la mayor ovación de la tarde…hasta que llegó Pablo Pérez, que a falta de dos minutos para el final se convirtió en el jugador más joven del Valencia Basket en debutar en la Liga Endesa (16 años). Y lo hizo con una canasta. Otra alegría más.
FICHA TÉCNICA
Valencia Basket, 87: Van Rossom (10), Martínez (10), Sato (6), Aguilar (8), Lishchuk (10) -quinteto inicial-, Triguero (8), Doellman (9), Lucic (3), Dubljevic (18), Lafayette (3), Pérez (2).
Gipuzkoa Basket, 58: Salgado (0), Winchester (3), Robinson (16), Ramsdell (9), Doblas (15) -quinteto inicial.-, Motos (0), Neto (10), Hanley (0), Olaizola (2), Cortaberría (3).
Parciales: 23-10, 19-15, 28-22, 17-11.
Árbitros: Martín Beltrán, Castillo y Aliaga. Sin eliminados.
Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada de la Liga Endesa celebrado en el pabellón municipal de la Fuente de San Luis ante 7.000 espectadores.