Oliver Lafayette tomó la responsabilidad en el momento más oportuno. La inconsciencia del base americano mostró su cara más genial ante el FC Barcelona con 22 puntos y 7 asistencias en una de las remontadas más espectaculares que se recuerdan en Valencia. «Me gustan este tipo de momentos en los que los partidos están igualados. Disfruto ganando, perdiendo de un punto y siempre querré el balón en mis manos», explicó.
«Es una gran actuación, pero lo más importante es la victoria. Hemos justicia con la remontada y nos quedamos en la segunda plaza», aseguró Lafayette a la conclusión del encuentro. «En la primera parte intenté algunos tiros que no entraron, pero tras el descanso los entrenadores me dijeron que fuera más agresivo, lancé con mucha más confianza y los tiros empezaron a entrar», prosiguió.
«Todo es cuestión de confianza, cuestión de mis compañeros. La diferencia es que nosotros como equipo tenemos confianza los unos en los otros y sabemos que tenemos que jugar duro, da igual que varios de nuestros mejores jugadores no estén disponibles. Nos desafiamos a nosotros mismos en el vestuario», subrayó.
Sobre si este triunfo ayuda a encarar la Copa del Rey con más confianza, Lafayette indicó que «cada victoria ayuda. Esto demuestra que lo podemos hacer con cualquier jugador en pista. Hemos ganado sin nuestro mejor jugador y esto demuestra nuestro carácter».