De menos a más. España comienza la andadura en ‘su’ Copa del Mundo con un partido asequible ante la selección de Irán en Granada (22h, Cuatro). Una prueba perfecta para calentar motores y comprobar el hambre de un combinado español destinado a luchar por el oro dentro un par de semanas frente a Estados Unidos. Pocas conclusiones se podrán sacar de un puro trámite en el que Álex Abrines tendrá sus primeros minutos como internacional absoluto.
La diferencia de nivel entre ambas selecciones es abismal y, precisamente, la fortaleza de los persas choca con el mayor peligro de los de Orenga: el juego interior. Haddadi es el único baluarte de Irán, pero su altura (2,18 metros) quedará neutralizada por la pareja que los Gasol formarán junto a Ibaka, mucho más rápida que el pívot iraní. Excompañero de Marc en Memphis, la lentitud de movimientos acabó con su aventura americana y no se espera que nada cambie ante la muralla española (aunque acabe con buenos números).
«Irán y Egipto serán difíciles por ser los más desconocidos», afirmó un ya recuperado Rudy Fernández en las horas previas al choque. El desconocimiento es un factor importante, pero no complicará el inicio del camino hacia el segundo título mundial. Aparte del gigantón iraní, solo el ala-pívot Kazemi, recogiendo las migajas que deje su compañero en los 2×1, es una amenaza real. El escolta Samad Bahrami también intentará demostrar su experiencia lejos de su país, pero su irregular tiro exterior le pasa factura a nivel de selecciones.
Para el debut mundialista Felipe Reyes será duda hasta el último momento por un golpe en el gemelo que ya le hizo perderse el último choque de preparación ante Argentina. Esa ausencia podría abrir las puertas de la rotación interior a un Víctor Claver que ha disputado más minutos como alero durante la gira. «Abrines está ya perfecto. Ha efectuado los dos últimos entrenamientos a tope y Rudy tampoco tiene problema alguno. Con el que hay que tener un poco de cuidado es con Felipe y veremos su evolución hasta la hora de comienzo del partido», aseguró Orenga en la rueda de prensa previa al choque.
El entrenador valenciano arriesgará lo justo ya que este fin de semana se plantea como un rodaje previo de cara a los desafíos de Brasil, Francia y Serbia. Esos encuentros definirán los cruces de octavos de final, aunque España ya sabe que no se podrá medir ante Estados Unidos hasta una hipotética final. Eso sí, antes de nada habrá que superar a Irán.