A pesar de sumar siete puntos y repartir cinco asistencias, la sensación que se le quedó a Sam Van Rossom en la boca fue agridulce. El Valencia Basket todavía debe trabajar y el base belga es el primero en reconocer que necesitan continuidad para seguir creciendo. «Hemos visto cosas buenas hoy pero también otras que no nos pueden pasar. Tenemos que intentar jugar bien durante más rato en el partido y así no tendremos estos parciales negativos que hemos tenido hoy. Tenemos que encontrar este ritmo durante 40 minutos, hemos tenido altibajos y ahora tenemos que empezar a cambiarlo», explicó.
Van Rossom ha sido protagonista en los últimos días por las negociaciones que su representante mantiene con el club ‘taronja’ para ampliar su contrato hasta 2017. «Prefiero no hablar de esto hasta que esté hecho. Yo siempre he dicho que estoy muy contento en el club, estoy feliz en Valencia y me siento una parte del equipo. Claro que me quiero quedar, pero ya veremos que pasa», añadió.
El base quiere centrarse en el futuro y eso pasa irremediablemente por el choque del viernes ante Real Madrid en la Supercopa. «Los partidos contra el Real Madrid siempre son difíciles. Ellos tienen ahora el equipo al completo, sabemos la calidad que tienen y en un partido puede pasar de todo. Toca prepararnos bien esta semana y veremos lo que pasa el viernes», comentó.