Vicente acudió a la Ciudad Deportiva de Paterna invitado por Miguel Ángel Angulo, con el que coincidió a primera hora y quien le propuso acercarse a las instalaciones a saludar a sus ex compañeros, hombres con los que compartió vestuario muchos años en el Valencia más laureado de la historia. Dicho y hecho: el que fuese mejor extremo del mundo en 2004 llegó en su vehículo particular y charló durante un buen rato con Angulo y con Rufete, manager general de la Academia Gloval.
Pronto se les unió el director deportivo, Braulio Vázquez, que estaba también trabajando en Paterna. La comitiva se trasladó al interior del edificio de la secretaría técnica, donde el ex internacional pudo ver en primera persona las reformas acometidas este verano, las nuevas oficinas, la sala de cine y la nueva metodología implantada por los técnicos de la escuela.
Vicente, a sus 32 años, está sin equipo tras pasar las últimas dos temporadas en el Brighton inglés. Sus racha de lesiones y el desgaste en su relación con su técnico, Gustavo Poyet, acabaron con el de Benicalap de regreso de Inglaterra, «toda una experiencia» como confesó a VLC NEWS. El futbolista asegura que el paso por la Segunda División inglesa le sirvió para «mejorar mucho el inglés», aunque añoraba mucho su tierra. El pasado verano sonó incluso como posible refuerzo para el Levante. ¿Y su futuro? «Por el momento, descansar».